Los milagros no existen… o puede que sí. El Villarreal posee números de club grande, reubicados dentro de un hábitat demográfico que convierten lo utópico en real para una entidad ubicada en una localidad de apenas 50.000 habitantes y de una circunscripción provincial que no alcanza los 600.000 habitantes. El milagro del Villarreal se basa en un proyecto sustentado en un crecimiento progresivo con una flecha que no ha parado de apuntar hacia el cielo en todas las gráficas, y a las que el descenso a Segunda División de hace tres temporadas solo pudo congelarlas momentáneamente, manteniéndolas en un estado latente del que se despertó con el ascenso con la misma inercia de subida permanente.

El Villarreal compite por meterse por cuarta vez en su historia en la Champions League. Es cuarto de la Liga española con un colchón de ocho puntos sobre el quinto clasificado y a una mínima distancia de tres puntos del todopoderoso Real Madrid, tercero. Restan todavía 16 jornadas de Liga y mucha tela que cortar, pero la trayectoria del equipo de Marcelino invita al optimismo con una racha de imbatibilidad de nueve jornadas, periodo de tiempo en el que el Submarino ha registrado la mejor puntuación de Primera División.

PROYECTO GLOBAL // Mientras la clasificación sitúa al Villarreal solo un peldaño por detrás de los tres grandes clubs españoles, Barcelona, Atlético y Real Madrid, y pugnando por un puesto en la próxima edición de la Liga de Campeones, la entidad amarilla ha logrado un estatus de equipo Champions con un crecimiento progresivo en todas las áreas que componen la estructura social, económica y deportiva de un club de fútbol, cuya organización es un ejemplo de gestión en el fútbol europeo y mundial.

Su presupuesto de 80 millones de euros parte casi en la salida con un superávit pautado dentro de la política de Roig Negueroles de no gastar más de lo que se ingresa. El Villarreal es uno de los pocos clubs con deuda cero del fútbol español y con una idea de empresa aplicada al fútbol.

La apuesta por el fútbol de formación no es cara a la galería. El Villarreal posee una amplia estructura de cantera, con la propiedad de dos ciudades deportivas: Miralcamp y Pamesa Cerámica. La primera con ocho campos de fútbol, una residencia con capacidad para dar alojamiento a cien jóvenes futbolistas y donde se ubican también las oficinas del club. La segunda, de reciente construcción, con cuatro campos de fútbol y preparada para albergar en sus dependencias gimnasios y servicios médicos. Los tres primeros equipos de su cantera ocupan puestos de privilegio, con el filial líder de Segunda B y con opciones de subir, el segundo filial en puestos de promoción de ascenso y el Juvenil, primero en su grupo de División de Honor.

EN AUGE SOCIAL // El Villarreal supera la barrera de los 18.000 abonados, una cifra muy importante para el estrato demográfico donde se ubica el club y que tiene visos de continuar creciendo en los próximos años.

La asistencia media al estadio del Madrigal de aficionados también ha ido mostrando un claro cuadro de crecimiento situándose en una cifra de 16.699, muy elevada teniendo en cuenta que los horarios de los encuentros no han sido en muchos casos favorables a la afluencia al campo, pero las gradas del templo groguet siempre han presentado un aspecto inmejorable esta temporada. En ese mismo apartado social destaca la inscripción de 20 peñas oficiales del Villarreal, contando la de reciente inauguración en Burriana.

El Villarreal es también otro de los clubs más atractivos para el espectador con una audiencia televisiva acumulada de casi cinco millones en la primera vuelta, datos importantes puesto que hay que tener en cuenta que al club no ha estado en la parrilla de partidos en abierto esta temporada en ninguna ocasión, una cuestión a tener en cuenta porque el resto de encuentros son ofrecidos en los canales de pago, con audiencias inferiores. H