Dicen que la venganza sabe mejor si se sirve fría, pero el Peñíscola se la tomó en caliente, imponiéndose por 6-3 al Gran Canaria solo tres días después de que este fuera su verdugo en la Copa. Una victoria que además sitúa a los de Albert Canillas cuartos, su mejor clasificación histórica.
Los locales empezaron buscando la portería del Gran Canaria desde los primeros compases del partido en el Municipal de Peñíscola. Terry tuvo la primera de los castellonenses en un lanzamiento de falta que se marchó muy cerca del palo. Acto seguido, Gus evitó las ocasiones de Rubén Orzáez y Marquinho, atajando un uno contra uno y un tiro abajo, respectivamente.
Los canarios tuvieron su primer intento a los seis minutos en una acción de Pichí detenida por Iker; e instantes después Juanillo remató un pase largo de Pablo Salado que se marchó fuera por poco.
El meta Gus volvió a parar las acometidas de los de Cani despejando un chut de Yeray y otro de Míchel. Sin embargo, no pudo sacar otro de Yeray tras un saque de falta botado por Carlinhos, que remató el vasco de primeras.
La alegría local duró tan solo unos segundos. En la frontal del área Pepe le pegó fuerte y metió el balón por la escuadra. Pero al filo del descanso Marquinho realizó un reverso por la banda para marcharse de un defensor, pasó el balón al centro y Juan Carlos, llegando desde atrás, hizo el 2-1.
Gran Canaria salió al segundo periodo con el ataque de cinco por mediación de Juanillo y una asistencia de Anás con el pecho a Zeus puso de nuevo las tablas.
En el 29, Yeray logró volver a poner por delante a los azulones con un disparo casi sin ángulo. Seguidamente Anás veía la segunda amarilla y era expulsado. Los peñiscolanos aprovecharon la superioridad y Juan Carlos estableció el 4-2. En el siguiente ataque Iván Rumbo estuvo atento al fallo de Gus y marcó en el rechace.
Juanillo salió de portero jugador en Gran Canaria. Una parada de Iker terminó con el disparo a puerta vacía del meta que supuso el 6-2. Saúl, en el 38, puso el 6-3 con el que terminó el partido. H
