El CD Castellón afronta una prueba definitiva en Los Arcos. Sobre todo, para mantener a resguardo su pequeña plusmarca, la de ser, al filo del ecuador de la temporada regular, el único equipo del grupo VI de Tercera División que no conoce la derrota a domicilio. Una racha que el domingo, desde las 16.30 horas, expondrá precisamente frente a un adversario que encadena siete victorias delante de su público.
Ni el Orihuela es el mejor local (el Atlético Levante ha vencido en sus ocho encuentros en la Ciudad Deportiva de Buñol) ni el Castellón el visitante más potente (ha sacado 18 puntos en 10 desplazamientos, uno menos que el Eldense, que, además, suma un viaje menos), pero ambos atesoran dos rachas imponentes.
Los escorpiones arrancaron el campeonato con un 0-0 frente al Torre Levante, pero, desde entonces, son todo victorias, con un saldo de 19 tantos anotados y apenas 2 encajados. Los de Miguel Ángel Villafaina pasaron de triunfos apurados frente a Silla y Novelda (ambos por 1-0) a, progresivamente, ir venciendo con una mayor holgura: 4-0 al Recambios Colón, 2-0 al Alzira, otro 1-0 al Buñol y sendos 4-1 frente a Villarreal C y Rayo Ibense.
INVICTO EN CASA DESDE ABRIL // Pero es que, además, retrocediendo en el tiempo, vemos que el Orihuela, en Los Arcos, se impuso en el tramo final de la pasada campaña al propio Castellón (1-0, en la penúltima jornada) y Novelda (3-0). El último equipo en sacar los tres puntos fue, curiosamente, el Rayo Ibense (0-2, el 8 de abril). Desde entonces, nueve victorias en 10 encuentros.
El Orihuela, ahí sí, es el equipo que menos goles concedidos a sus visitantes: apenas dos, los anotados por los últimos dos equipos en desfilar por Los Arcos.
Algo similar pasa con el Castellón, porque si bien no es el que más puntos ha cosechado lejos de Castalia, sí es el máximo realizador: 16. Es decir, que el domingo se verán las caras dos conjuntos con unas dinámicas absolutamente antagónicas.
Los orelluts, con cuatro victorias, seis empates y un casillero de derrotas por estrenar a domicilio, no guardan gratos recuerdos de Los Arcos, donde nunca han ganado y donde han vivido todo tipo de trances no del todo satisfactorios, como el 1-0 de la pasada temporada que obligaba a asegurar el billete para los play-off en la última jornada, el 4-2 del año anterior (después de un 4-0) y un episodio que precipitó el divorcio entre Kiko Ramírez y David Cruz... O, remontándose mucho más en el tiempo, el 0-0 del año del récord en Segunda B (2003), con José Luis Oltra, con lanzamiento de un casco de moto al terreno de juego incluido.
Del pasado al presente, porque el del domingo será un enfrentamiento prometedor, con reencuentros como el de Juanjo Gracia (ya estará para ser convocado) con la afición del Orihuela; y de Rafita y Antonio Martínez con el Castellón. El 9 del Orihuela mantendrá un duelo en la distancia con el 9 del Castellón, David Cubillas, ambos empatados con ocho tantos. Un Cubillas que, junto a Rubén Fonte y Nico Pascual-Leone (de vuelta de EEUU), llegan enrachados para amargar la tarde a Emilio José Romero, el portero del Orihuela que es, además, el menos goleado del grupo.
