El Villarreal se ha plantado ante las altas exigencias del Betis por el traspaso del franco-senegalés Alfred N’Diaye (26 años), el objetivo que baraja la entidad amarilla para fortalecer el centro del campo para afrontar la Liga y la Champions. El Villarreal no quiere subir de los 4,5 millones de euros que ofreció en un primer momento por el jugador africano, un futbolista de gran despliegue físico, polivalencia --puede actuar también como central-- pero al que en el club amarillo no valoran en el mínimo de 10 millones de euros con los que se ha descolgado la entidad verdiblanca para dejar salir a N’Diaye.
En un principio, la entidad que preside Fernando Roig no tiene pensado introducir a ninguno de sus jugadores en la operación, a pesar que desde Sevilla se ha insistido desde el primer momento en que el mediocentro Pina formara parte del traspaso para reforzar el nuevo proyecto que tendrá entre manos el uruguayo Gustavo Poyet, que firmó el pasado mes de mayo su contrato para hacerse cargo del banquillo del Betis.
Las notables diferencias entre el Betis y el Villarreal han dejado en punto muerto la opción de que Alfred N’Diaye --que tiene cerrado un acuerdo con el club amarillo de larga duración, seducido por la posibilidad de disputar la Champions-- vista de amarillo en el ejercicio 2016/2017. Cada una de las partes quiere jugar sus bazas. Mientras el Villarreal espera que la entidad andaluza ceda en sus pretensiones ante la necesidad de liquidez para afrontar las altas fichas de su plantilla, además de alguna que otra indemnización por ruptura de contrato, el Betis no es ajeno a la caja que ha hecho el club groguet en el inicio de este mercado de verano con la venta al Manchester United de Eric Bailly, a cambio de 40 millones de euros, y aspira a sacar tajada. H
