La afición del Castellón, aunque tímidamente, empieza a despertar y, como los almendros, empieza a florecer en este invierno/primavera que estamos viviendo. Los más de 200 aficionados que, el sábado, acudieron hasta el Nou Camp de Morvedre pueden dar buena fe de ello pero es que, dos semanas atrás, en un viaje más lejano (hasta Ontinyent), ya acudieron cerca de un centenar, después de muchos desplazamientos con una presencia de orelluts simplemente testimonial.

No era, el del Atlético Saguntino, tal vez el mejor campo para visitar, por aquello de que, hasta el sábado, solo había asistido a victorias locales. Con todo, los de Ramírez estuvieron bien arropados por más de 200 seguidores, que hicieron frente al millar de romanos para dotar al partido de un ambiente de superior categoría. Y eso que, algunos, repetían de los que, 15 días atrás, habían estado en El Clariano (2-0).

fINALÍSIMA // Será complicado que se repitan estas cifras en algunas de las salidas que restan (Novelda, Orihuela y Crevillent), pero sí en los últimos de la campaña regular (Bunyol o Sedaví, para medirse al Recambios Colón).

Pero, antes que todos esos, está el compromiso a domicilio durante el primer fin de semana magdalenero, en la Ciudad Deportiva de Miralcamp, con albinegros y amarillos, ahora empatados, jugándose una de las plazas de la promoción.

El próximo paso es que el ambiente de Castalia crezca a la par que la afluencia de público. A la espera de que llegue la primavera y el cambio horario (el Castellón tiene la intención de volver a jugar los domingos por la tarde desde finales de marzo o principios de abril), el club mantiene la cita de las 12.00 horas para este domingo, frente al Alzira. H