El Valencia encajó la primera derrota en la jornada 14. Después de protagonizar el mejor arranque de su historia en Primera (con ocho triunfos seguidos), de recibir un aluvión de elogios por el juego desplegado, el conjunto de Marcelino pinchó cuando lo tenía todo a favor para refrendar su candidatura al título recortando puntos al Barça y alejándose más del Madrid, que habían pinchado en sus compromisos del sábado. Pero los che sufrieron vértigo en el Coliseum, el mal de altura de verse obligados a ganar, en un encuentro que se puso a favor en el minuto 25 con la expulsión por doble amarilla del uruguayo Mauro Arambarri, poco después de que el árbitro anulara un gol a Amath por un dudoso fuera de juego.

CAMPO PROPICIO // Todo parecía de cara para el Valencia en un campo donde sus rivales directos se habían llevado el triunfo (0-1 el Sevilla, 1-2 el Barça y 1-2 el Madrid), pero la tarjeta roja dio un plus de motivación a los azulones y aletargó más a los visitantes, que se mostraron como un equipo gris, sin ideas, apático. Pese a su inferioridad numérica el Getafe se hizo dueño del partido y Jorge Molina estuvo cerca de inaugurar el marcador con un cabezazo que se fue arriba por poco.

El paso por los vestuarios parecía que serviría para que Marcelino (cumplía en la grada el segundo partido de sanción) pusiera las pilas a sus futbolistas, pero fue el Getafe el que continuó enchufado. Ángel Rodríguez, solo ante Neto, avisó con un chut que rozó el poste. La acción espabiló al Valencia (min. 60), aunque fue un espejismo porque Markel Bergara se sacó un disparo desde fuera del área que sorprendió al portero che tras tocar en Gabriel. Parejo, en su cuarto lanzamiento de falta, envió el balón al palo y agotó las opciones de su equipo ante un rival que jugó con una velocidad más y se llevó la victoria.