La Inspección de Trabajo ha dictaminado que los repartidores de Amazon Flex, el servicio de entrega a domicilio del gigante logístico, operan como falsos autónomos. La 'policia laboral' ha detectado un total de 2.921 personas trabajando bajo esta modalidad en los centros de San Fernando de Henares (Madrid) y El Prat del Llobregat (Barcelona). Para ello ha interpuesto requerimientos de cotizaciones pendientes a la Seguridad Social que podrían superar los tres millones de euros, según ha avanzado el sindicato denunciante UGT.