El Mobile World Congress no se irá a Madrid. Así lo remarcó ayer el consejero delegado de GSMA, John Hoffman, en la presentación de la que será su catorceava edición en Barcelona, donde opera desde el 2006. Entre bromas e ironías, el máximo responsable del evento rechazó así las amenazas de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, que aseguró que pretendía arrebatarle a la ciudad condal y a Hospitalet de Llobregat su condición de anfitrionas. «El Mobile no se va a ningún sitio y eso incluye Madrid», espetó. «A veces no sé de donde los periodistas sacáis la información», sentenció.

El MWC tiene contrato con la Fira para seguir en Barcelona hasta el 2023. Más allá de esa fecha, según quiso dejar claro Hoffman, son todo especulaciones. Además de la capital catalana, la GSMA también celebra otras dos versiones más pequeñas del congreso móvil: una en Shanghái, China (entre el 30 de junio y el 2 de julio) y otra en Los Ángeles, Estados Unidos (del 28 al 30 de octubre). El congreso de telefonía móvil más importante del mundo espera recibir en esta próxima edición a hasta 110.000 visitantes de 200 países y territorios.