Clínica Blay Monzó constituye todo un referente en odontología en la capital de la Plana, cuya máxima es proporcionar el mejor servicio a sus pacientes y velar por la salud bucodental de los mismos, mediante la aplicación de los tratamientos más avanzados y un correcto asesoramiento.

En este sentido, los dos odontólogos que encabezan el equipo de este centro, Gonzalo Blay y Francisco Monzó, abogan por la prevención como factor clave para buena salud oral. Según señalan, «es esencial la educación en este área, así como la promoción de estilos de vida saludables. La importancia de adquirir unos correctos hábitos en salud dental es fundamental, ya que muchas veces se adquieren modos incorrectos, derivados de poca información o por no haber recibido una correcta educación al respecto».

La prevención sirve para adelantarse al desarrollo de enfermedades o patologías como la caries dental, la periodontitis o el tan temido cáncer oral, que se sitúa ya entre los 10 más frecuentes y que se cura en un 90% de los casos, en fases iniciales.

«Tenemos un sinfín de pacientes que acuden a consulta lamentándose porque tendrían que haber venido antes. Es una realidad muy frecuente y tiene como origen traumas del pasado, el miedo o la dejadez. Muchos de estos pacientes, de haber acudido al dentista antes, se hubieran ahorrado gran parte del tratamiento».

Como destacan ambos odontólogos, el cepillado de dientes es un paso clave en la prevención de la salud dental. Los dientes y encías deben estar limpios, «por eso recomendamos cepillarlos tres veces al día, durante 2-3 minutos cada vez, pasando el cepillo de manera equitativa por todas las zonas. Además, recomendamos utilizar el cepillo interdental o el hilo dental a diario, para eliminar la placa que queda en los lugares donde el cepillo no alcanza». Usar el cepillo eléctrico o manual dependerá de las preferencias de cada usuario. En el caso del cepillo manual, la importancia radica en el uso de una correcta técnica de cepillado, «aspecto en el que nuestras higienistas de confianza nos pueden asesorar para indicarnos qué técnica debemos usar en cada caso».

Asimismo, en la clínica Blay Monzó, todos los pacientes con implantes, algún tipo de prótesis o cualquier grado de enfermedad periodontal (de las encías), por protocolo, deben acudir a la consulta cada seis meses para poder realizarles un tratamiento de mantenimiento, «de esta manera podemos identificar de forma precoz los posibles problemas que puedan surgir», indican los responsables.

Especial importancia tienen los niños. «A partir de los 3 años es aconsejable que acudan a una revisión. Es una etapa de desarrollo y podemos empezar a identificar alteraciones, patologías, maloclusiones o parafunciones. La prevención es el mejor tratamiento. También los controles periódicos. Siempre decimos a nuestros pacientes que no los dejen de lado, ya que su salud está en juego».