Almassora sonó en China. En concreto, la guitarra de Ana María Archilés. La artista triunfó en la ciudad de Wuhu, de tres millones de habitantes y a 350 kilómetros de Shanghai, en la que estuvo de gira el pasado julio.

Un viaje de 14 horas de avión que le permitió estar en contacto con alumnos locales y de la provincia de Anhui, a los que impartió clases magistrales. «Venían con música española y de Francesc Tárrega para que yo les diera instrucciones», cuenta Archilés, satisfecha con la experiencia.

Uno de los momentos más memorables del paso de la guitarrista por China fue el concierto ofrecido el 18 de julio en el Teatro de Neisi De Yu Geng Shan, en el que colgó el no hay billetes, con la presencia de numerosos profesores y alumnos de guitarra así como políticos locales. «Gustó muchísimo», recuerda Archilés. Además, se da la circunstancia de que es la primera ocasión en la que actúa una mujer en el festival.

Una cita, donde fue presentada por el luthier valenciano Manuel Adalid como una de las mejores intérpretes de guitarra de España, en la que ejecutó obras de Rosa Gil, Rafael Beltrán, Rolando Navarro, José Luis Merlín y Claudia Montero con la guitarra Catedral. Se trata, en palabras de la artista, de una guitarra que tiene una serie de innovaciones y destaca por su sonido elegante, con mucha proyección. Con el mismo instrumento, cedido por sus patrocinadores, Guitarras Esteve, también impartió clases a los estudiantes de guitarra.

La artista compagina desde junio su trabajo como profesora en el Conservatorio de Música de Castelló con su tarea política como concejala del PP en el Ayuntamiento de Almassora.