María Antonieta fue toda una celebridad del siglo XVIII. Su recorrido dio pie a intrigas de todo tipo, rodeada de la fastuosa vida palaciega previa a la revolución gala y de una reputación que le perseguía de proaustriaca, de donde era originaria, y derrochadora. Pero no solo entonces fue el foco de las miradas, puesto que, más de dos siglos después de su muerte en la guillotina, sigue generando titulares. La mujer de Luis XVI vuelve a ser noticia por la reciente subasta que protagonizó su bolsa de viaje. Del lujoso objeto, recoge Vanitatis, se esperaba un precio de venta de unos 10.000 euros. Finalmente, su comprador se lo ha llevado por 43.750 euros, cuatro veces más que la estimación inicial.

Según informa Paris Match, de la venta se encargó Maison Osenat y el escenario de la subasta, que se celebró el 24 de mayo, fue el mismo palacio de Versalles, donde residió María Antonia Josefa Juana de Habsburgo-Lorena, su nombre completo.

restaurado / No fue el único objeto que salió a la venta ese día pero sí el que dio la sorpresa. Este cofre de viaje, relativamente raro, es de madera forrada con cuero. «El interior ha sido restaurado, pero queda un forro más antiguo, hecho de lona sin blanquear, que presenta en la tapa un clavo de forma ovalada que sujetaba un trozo de tela que probablemente estaba bordado con sus iniciales o su escudo de armas», rezaba la inscripción de la bolsa, según apunta Vanitatis. Además, en el catálogo se explicaba que solo tres ejemplares de este modelo han sobrevivido y que los otros dos se encuentran en el palacio. Además de esta bolsa de viaje, la subasta ofreció otras pertenencias de la consorte, algunas de lo más curiosas. Una de ellas, por ejemplo, fue un mechón de pelo de Luis XVI, que alcanzó un precio de 4.000 euros.

32 millones / También, una servilleta de damasco que María Antonieta usó el 11 de junio de 1775, cuando fue coronado su marido, según Paris Match. La misma contiene la flor de lis -insignia de la casa real- un ramo de rosas y coronas de hojas. Este objeto también fue vendido por un importe que superó las expectativas, puesto que alcanzó un valor de 14.500 euros, cuando se estimaba que llegaría a unos 2.000, más de siete veces lo esperado.

Aunque el pasado 24 de mayo hubo sorpresas con los precios que alcanzaron algunas pertenencias de María Antonieta, siguen lejos de los 32 millones de euros que pagaron por una perla natural de la regente en la subasta que la casa Sothesby’s realizó en la ciudad de Ginebra en noviembre del 2018.

Fueron palabras mayores las pertenencias por las que se pujaron en aquella cita, puesto que se trataba de un lote de diez joyas de la familia Borbón Parma. En este caso, y según apuntó Vogue en su momento, llevaban casi 200 años sin mostrarse estos lujos reales. Todas ellas estuvieron tasadas en su momento en unos 3 millones de dólares, como explicó ¡Hola!, aunque alcanzaron un precio conjunto de 43 millones de dólares -unos 38 millones de euros- en el que el colgante de la perla natural, de unas dimensiones de 26 x 18 milímetros, fue el plato fuerte.

MECHÓN DE PELO // No obstante, también hubo otras joyas que multiplicaron su valor estimado, como un broche de diamantes que llegó a los 1,5 millones de euros, cuando los cálculos acerca del precio final rondaban los 70.000 euros. Y, como sucedió el pasado día 24, también salió a la venta un mechón de pelo de su marido, quien compartió el mismo destino que María Antonieta en la guillotina en 1793.

En definitiva, esta última subasta y la que se celebró en el 2018 ponen de relieve la magnitud de una figura histórica que vuelve recurrentemente a la actualidad, tras una sugerente vida que ha nutrido las páginas de historia y la creatividad de novelistas y directores de cine a lo largo de los años.