Una semana después de que Donald Trump presentara su plan de paz para Oriente Próximo en la Casa Blanca, de la mano del primer ministro israelí en funciones, Binyamin Netanyahu, la UE reaccionó ayer en bloque y rechazó la propuesta, que viola el derecho internacional y contradice la visión europea sobre la solución de dos estados.

El plan de Trump, que él mismo bautizó como el «acuerdo del siglo», sienta las bases para la anexión israelí de las colonias judías en Cisjordania, empezando por los agrícolas de la fértil zona palestina ocupada del Valle del Jordán, reafirma la soberanía israelí sobre Jerusalén y obliga a los palestinos a desarmarse y renunciar al retorno de los refugiados para obtener algo similar a un mini-Estado.

«En línea con el derecho internacional y las resoluciones relevantes del Consejo de Seguridad de la ONU, la UE no reconoce la soberanía de Israel sobre los territorios ocupados desde 1967», afirmó ayer el alto representante de la Política Exterior de la UE, Josep Borrell.