El primer ministro francés, Manuel Valls, ha anunciado este lunes por la tarde su dimisión como jefe del Gobierno para lanzar su candidatura a la presidencia de Francia en las elecciones que se celebrarán en la primavera del 2017. El jefe del Ejecutivo ha comparecido en el ayuntamiento de Evry, su feudo electoral en la región de París, para hacer público lo que era un secreto a voces después de que el presidente de la República, François Hollande,renunciara a aspirar a un segundo mandato.

Valls concurrirá a las primarias que los socialistas organizarán a finales del próximo mes de enero. Liberal en lo económico y duro en materia antiterrorista, los últimos sondeos indican que su popularidad gana enteros entre el electorado de izquierdas. Sin embargo, a partir de ahora tendrá ante sí el reto de intentar unir a las dos almas del socialismo tras años de afrentas con el ala izquierda de su partido.

La dispersión del voto progresista -hay de momento siete candidatos que han anunciado su participación en las primarias y otros tres que lo harán fuera de ellas- hará que el vencedor tenga difícil alcanzar el Elíseo.Todas las encuestas sitúan en la segunda vuelta electoral de las presidenciales al líder de derecha, François Fillon, y a la presidenta del ultraderechista Frente Nacional, Marine Le Pen.