No va a ser fácil, después de tantos años en los que la administración ha estado mirando hacia otro lado y dedicándose únicamente a sancionar, que los nuevos equipos de gobierno del Ayuntamiento de Nules y de la Generalitat puedan poner en marcha el desarrollo de la Marjal de Nules. Sin embargo, el Ayuntamiento lo está haciendo. Se está empezando a transformar un problema en una oportunidad económica. Y ya ha dado el primer paso, que es saber qué posibilidades pueden aprovecharse en el marco de una complejísima legislación de protección en la que ya se es consciente que va a ser casi imposible que los terrenos de marjal dejen de estar catalogados como humedales y protegidos. A partir de aquí hay que profundizar en qué se puede hacer. Y la Red Natura 2000, en la que está incluida la Marjal de Nules, nos apunta el camino a seguir.

Uno de los aspectos más destacados de la aprobación de la nueva PAC (Política Agraria Común) es el hecho de destinar un 30% de los pagos directos a los pagos verdes, como las zonas de interés ecológico (Red Natura 2000). Ello, unido al Ecoturismo y el empleo verde, convierten a la marjal como zona prioritaria a la hora de establecer el reparto de fondos de desarrollo rural Feder o fondos LIFE, entre otros. Y ahí, junto con la creación y gestión de actuaciones de minimización del impacto generado por los núcleos de viviendas en el suelo no urbanizable, empieza a estar la solución. H

*Abogado. Urbanista