Con las peores cifras de contagiados y fallecidos por el covid-19 en la Comunitat Valenciana, la respuesta del president Ximo Puig y la Generalitat es seguir recortando en sanidad, ocultando datos reales y dificultando la realización de test.

Lo hemos comprobado esta semana pasada en municipios como Moncofa o Vilavella, donde se han cerrado los ambulatorios que construyó el PP, durante los fines de semana. Son dos recortes más en plena pandemia que se suman a otros cierres, como el de Vila-real, Almassora o los recortes en atención médica en el interior. Por hemos hecho desde Castellón al Consell cuatro solicitudes:

1.- Que mantenga al personal sanitario y los centros de atención de los municipios y que concentre todo lo que va a gastar en su aparato de propaganda en nuevo personal sanitario. La Generalitat sacará este año 376 plazas fijas de empleo en À Punt, que debería destinarse ahora a salvar vidas.

En el último año auditado por la Sindicatura de Cuentas, 2019, la consellería socialista tuvo contratados 11.145 sanitarios menos que en el último año popular, 2015. Si a la reducción de personal se añade el cierre de centros, el resultado es, la caótica situación que vivimos en la actualidad.

2.- Que cuenten la verdad a vecinos y ayuntamientos. Desde el PP compartimos la justa indignación de los alcaldes, de los concejales y todos aquellos que trabajando día a día en sus municipios carecen de información veraz. Los ayuntamientos, los 135 de nuestra provincia, quieren ser instrumentos útiles en tareas de desinfección, bandos, uso de instalaciones públicas… Pero hoy, desgraciadamente, viven con los ojos tapados porque la Conselleria no da un solo dato cierto y actualizado.

3.- Como el primer día pedimos test, los mismos que se hacen en los países que están saliendo de la pandemia en estos momentos, y no como ahora, cien puntos menos que en el resto de España.

El Gobierno valenciano cree que ocultando los contagios que se producen logra apariencia de mayor salud y lo que está haciendo es alargar la pandemia crear sensación de falsa seguridad.

4.- Que se refuerce y objetive el calendario de vacunación. No es posible que se despisten vacunas de la Conselleria de Sanitat para alcaldes y amigos, estamos hablando de salvar vidas. No es posible que se hayan desviado 3.000 vacunas de la provincia de Castellón a otras provincias. Somos la comunidad autónoma con más sanitarios contagiados.

Puig debe recuperar el control y apostar por la transparencia, en lugar de estar pendiente de esconder los escándalos familia y la trama de pagos con dinero público a sus hermanos, debe gestionar la grave situación que nos cuesta vidas todos los días y que arruina a trabajadores y empresarios de la provincia y toda la Comunitat Valenciana. H

*Presidente Provincial PP Castellón