Querido lector/a, a pesar de que va pululando por ahí una moción de censura de Podemos, de Pablo Iglesias, todo indica que no está presente en el ambiente coloquial o social. O dicho de otra forma si se prefiere, tampoco está en foros tan populares como las barras de los bares.

¿Es que no existen razones políticas para una moción de censura contra Rajoy, contra el PP? ¡Claro que sí! Incluso diré que existe tanta y cotidiana corrupción que hay motivos para que, por amor a España y por eso del patriotismo, dimitan colectivamente o abandonen voluntariamente las instituciones y permitan que otros ayuden a regenerar la democracia y la política. Así de claro.

Pero ¿qué pasa?, ¿por qué no impresiona ni florece? Aquí pueden existir varias y hasta coincidentes razones. Posiblemente, y es una simple opinión, porque los motivos y las consecuencias de la moción de censura ni encandilan ni preocupan a los propietarios de los grandes grupos mediáticos que, como se ha visto hace poco con Pedro Sánchez y su no es no, son capaces de colaborar en encender la opinión pública a favor y en contra si alguna de las propuestas les interesa o les inquieta. Posiblemente, también, y es otra opinión, porque en estos momentos, después de que Iglesias no votara a favor de la investidura de Sánchez, de las historias de división del PSOE entre la abstención y el no es no de la confrontación entre Susana y Pedro en primarias, de que Sánchez no esté en el Congreso de Diputados… etc, parece que la moción de censura de una minoría como Podemos busca más ir contra el PSOE y facilitar el prestigio de Pablo Iglesias como líder de la oposición que el propio desalojo de Rajoy del poder político. Y es que, la política, no tiene que ver con un debate por la verdad, más bien responde a lo posible, a los viable. A partir de ahí, parece ser que en estos momentos y hablando en serio, no es oportuna ninguna moción de censura.

*Experto en extranjería