Hermanos: El Tribunal Superior de Justicia ha anulado el Pativel. El Plan que pone orden a la costa para evitar que nuestro litoral se convierta en un continuo de urbanizaciones de norte a sur.

Para anularlo, dos de los tres magistrados y magistradas que lo han juzgado han cambiado de criterio respecto al que utilizaron para el PAT de l’Horta de València, el cual salió indemne de un juicio similar a este y contra el que se utilizaron argumentos muy parecidos.

La verdad es que los jueces y magistrados, a veces no valoran bien las consecuencias de sus actos. Te dejan a Castellón sin PGOU durante una década porque no se expuso debidamente a información pública por una segunda vez. Con lo fácil que hubiera sido exigir que se subsanara este trámite (en un par de meses hubiera sido suficiente). O, como es el caso del Pativel, se anula porque falta el Informe de Perspectiva de Género, el Informe de viabilidad y sostenibilidad económica y una auténtica valoración de diferentes alternativas técnicas.

Sin perjuicio de que discrepo que, para un documento tan generalista como es un Plan de Acción Territorial, hagan falta estos informes y que creo que las alternativas posibles existían y estaban debidamente valoradas, ¿No podrían haber decidido sus señorías que se subsanaran estos trámites y se aprobaran en lugar de tirar al traste todo el trabajo de muchos años y dejar expuesta nuestra costa a las locuras de unos pocos?

La suerte es que, pese a que pudiéramos quedarnos momentáneamente sin Pativel, la estructura jurídico-territorial de nuestro urbanismo va dificultar bastante que estas barbaridades puedan llevarse a cabo, y el Pativel seguirá siendo un guion válido para poner freno. Veremos que dice el Tribunal Supremo. H

*Urbanista