Un conductor de 24 años ebrio y con el carnet retirado provocó el miércoles por la noche un accidente de tráfico en Castelló y se dio a la fuga. El susodicho, que responde a las iniciales V.F.M.M., iba al volante de un Citröen C3 azul y circulaba por la plaza País Valencià, a la altura de la calle del Trabajo, sobre las 20.30 horas.

Por delante del turismo iba también un autobús de la línea 12, que en un momento dado de la marcha puso el intermitente y se dispuso a girar, siguiendo su ruta. En ese preciso instante, V.F.M.M. aceleró bruscamente e intentó rebasar al autocar. Colisionó violentamente contra el vehículo público, hizo un trompo y consiguió recuperar el control del utilitario antes de salirse definitivamente de la vía.

Lejos de detenerse y comprobar si había causado heridos en el autobús, el conductor del Citröen C3 se dio a la fuga del lugar. Fue entonces cuando el chófer se puso en contacto de inmediato con el 092 para dar aviso de la huida a la Policía Local.

Por fortuna, el conductor del bus había pedido a todos los pasajeros que ocuparan los asientos que quedaban libres para que nadie fuera de pie. De no haber sido así, el accidente hubiera causado caídas en el autocar de línea.

Los agentes municipales comenzaron a buscar el vehículo huido con la descripción aportada por los testigos. No fue difícil encontrarlo y es que el coche presentaba daños muy llamativos en uno de sus laterales. Lo localizaron en las inmediaciones.

V.F.M.M. negó que fuera él quien iba al volante del turismo y, supuestamente, intentó hacer creer a los policías locales que era su pareja la que conducía, aunque la chica ni siquiera estaba allí. Tras realizarle las pruebas de alcoholemia pertinentes, el conductor dio un resultado superior al triple de lo permitido (0,80 mg/l). Además, los efectivos comprobaron que tenía el permiso de conducir retirado por un juzgado de la capital.

Especialistas de Atestados lo investigan por un presunto delito contra la seguridad vial y, tras comparecer en sede judicial, el joven conductor ha quedado en libertad con cargos.

Alcohol y una infracción, claves en otro accidente

Alcohol al volante y una infracción por no respetar un ceda el paso. Fue la combinación de factores de riesgo que causó el accidente de la avenida Blasco Ibáñez de Castelló el martes por la noche. Como publicara este periódico, dos coches colisionaron entre sí en una intersección y se estrellaron contra la valla perimetral de una finca residencial.

Los turismos derribaron el cercado de hierro que rodea una zona común de la finca y, por suerte, no dejaron ningún herido. El impacto, que provocó un gran estruendo en la zona, no pasó inadvertido entre los vecinos y viandantes.

A la llegada de la Policía Local de Castelló, le practicaron las pruebas de alcoholemia a los conductores. Uno de ellos dio positivo, aunque con una tasa (0,31 mg/l) que no constituye delito y se queda en denuncia administrativa.

Al parecer, el otro implicado también cometió una infracción al no respetar una señal de ceda el paso, según determinaron los integrantes de la unidad de Atestados, encargados de la investigación del accidente.

Los Servicios de Atención Médica de Urgencia (SAMU) también se desplazaron a la zona, aunque el accidente de tráfico quedó en un susto y daños materiales.