Once años de cárcel y la devolución de todos los bienes que robó. Es la petición que realiza la Fiscalía para un acusado de desplumar a sus cuñados tras acceder en sus viviendas con las llaves que su suegra guardaba. La Audiencia Provincial de Castellón celebra el juicio contra él el próximo 29 de octubre, cuando el procesado se sentará en el banquillo de la Sección Primera, a partir de las 10.00 horas, para responder por presuntos delitos de robo con fuerza en las cosas y un delito continuado de estafa.
Los hechos de los que se le acusa tuvieron lugar en el verano del 2014. Según relata la Fiscalía, el procesado se adueñó de las llaves que su suegra guardaba para entrar, posteriormente, en casa de sus cuñados. En el primer inmueble sustrajo 200 euros en efectivo, un ordenador portátil y un disco duro y joyas y relojes valorados en 7.000 euros. En el segundo domicilio, cogió más alhajas, relojes, libretas bancarias y también el DNI de su cuñado.
Con ese documento oficial, posteriormente, hizo reintegros y transferencias bancarias por valor de 6.690 euros en sucursales de Vila-real y Almassora, usurpando la identidad del titular y firmando por él. Esa práctica la realizó hasta tres veces más. Repitió el modus operandi en entidades de Vila-real, Almassora e incluyó también un banco de la Vall d’Uixó. Incluso, llegó a tocar la cuenta bancaria de su sobrino, que era menor de edad.
En total, extrajo de las cuentas hasta 20.000 euros, según sostiene el Ministerio Público. Asimismo, en el mes de agosto del 2014 se personó con las joyas robadas en establecimientos de compraventa de oro de Vila-real y logró vender algunas piezas, puesto que las víctimas aún no se habían dado cuenta de la sustracción.
Finalmente, el acusado, sobre las 8.30 horas del 16 de septiembre se dispuso a sacar dinero en una entidad de la calle Hospital de Vila-real, utilizando nuevamente el DNI robado de su cuñado. Al lugar acudieron los agentes, que pudieron arrestarlo tras ser sorprendido in fraganti.
Además de la pena de prisión, la Fiscalía pide que el procesado pague una multa de 3.720 euros y devuelva todo lo que sustrajo a sus cuñados --en total 30.558 euros--. Asimismo, pide que se forme una pieza separada de responsabilidad civil, exigiendo al acusado fianza suficiente para garantizar los pagos.
El presunto ladrón se verá nuevamente las caras con sus cuñados, víctimas de su desfalco, en los juzgados de la capital. El juicio comenzará con la declaración del procesado, que podrá elegir contestar a quien él considere y que no está obligado a decir la verdad, pues el Código Penal español le permite mentir.
