La Policía Local de Vinaròs ha confiscado 27 kilos de alimentos que no cumplían con la normativa sanitaria. Los agentes han llevado a cabo la inspección de un vehículo isotermo que circulaba por la avenida Pablo Bejar, transportando diverso material alimentario en su interior.

Tras requerir al conductor que enseñase la carga, comprobaron que llevaba distintas cajas de comida y que estas no se encontraban almacenadas a la temperatura necesaria legalmente. Por ello, han requerido la presencia en el lugar de un técnico de la inspección de Salud Pública.

Los agentes han levantado acta de control al detectar en el transporte varias infracciones. Entre las irregularidades observadas, el vehículo transportaba productos ultracongelados a una temperatura de +1’8°, cuando debería ser de -18° y productos frescos a una temperatura de 14°, cuando deberían estar conservados a 0°. Todos los alimentos almacenados superaban las temperaturas legalmente establecidas y por lo tanto, su posterior consumo, podían suponer un riesgo para la salud pública.