Castellón apenas reutiliza el 5,8% del agua que tratan sus 114 depuradoras. Son 3,2 Hm3 que solo suponen el 2% de lo que se aprovecha de forma directa en el conjunto de la Comunitat, según datos proporcionados por la Entidad de Saneamiento de Aguas (Epsar) y el informe de su gestión durante el año 2015.

Las razones de este bajo índice, especialmente en comparación con Valencia y Alicante, que reutilizan el 56% y el 42% de los recursos, son múltiples. Entre ellas, se cuentan aspectos culturales, como la mentalidad más conservadora de los agricultores, y otros técnicos como el alto precio de trasladar los recursos hasta las zonas de regadío; la disponibilidad de más agua en este territorio que en las otras provincias, y también carencias en la red del alcantarillado en la zona litoral, lo que causa una excesiva salinización del líquido depurado.

SALINIDAD // El gerente de Epsar, Enrique Lapuente, señala, desde la premisa de que las decisiones sobre el uso de las aguas una vez tratadas no es competencia de la entidad, destaca que “hay instalaciones con problemas de salinidad alta en el litoral como es Orpesa o Castellón”, lo que la inhabilita para su reutilización, aunque la calidad sea muy alta desde otros puntos de vista.

Otras fuentes consultadas han confirmado que la antigüedad del alcantarillado, que sería preciso renovar, provoca filtraciones que son las que generan ese exceso de sal en el líquido.

Por su parte, el presidente del Sindicato de Riegos del Mijares, Enrique Font, señala, además, que “en Castellón apenas necesitamos utilizar el agua de las depuradoras porque nos arreglamos con la superficial y la de los pozos”. Añade que “se usa muy poco y en sitios concretos como es la Vall o Moncofa”. No obstante, vaticina que “en un futuro habrá que ir pensando en usar aguas depuradas porque cada vez hay menos recursos disponibles”.

Por otra parte, y en cuanto a los datos de funcionamiento, según el jefe de Proyectos, Obras y Explotaciones de Epsar, José María Santos, Castellón cuenta con 114 depuradoras, que trataron durante el último año un caudal de 54,8 Hm3, lo que representa un incremento del 4% sobre el ejercicio anterior, alza sensiblemente superior al promedio autonómico, que es del 2,65%.

En cuanto a instalaciones e inversiones en la provincia, el gerente de la entidad, Enrique Lapuente, indica que “todas las poblaciones de más de 2.000 habitantes tienen ya sus plantas operativas”, después de la reciente apertura de la depuradora de Peñíscola, un proyecto de 22,17 millones de euros. Además, en el 2015 se acabaron las de Benicarló (4,9 millones) y Moncofa (2,5).

En todo caso, Lapuente tiene la previsión de que en este segundo semestre “demos un impulso fuerte al plan de obras, y en diciembre haya cambiado significativamente la situación en Castellón y en el resto de la Comunitat”.