El alcalde de Vila-real, José Benlloch, anunció ayer una sorpresiva remodelación en el equipo de gobierno, a poco más de cuatro meses de las elecciones del 26 de mayo, y fía a su núcleo duro aspectos claves de la gestión municipal. La reestructuración refuerza el papel de clásicos en la política local como Javier Serralvo, que se dedicará exclusivamente a la portavocía, Deportes y Salud; y Francisco Valverde, quien asume la limpieza. También da un papel relevante, cara a la sociedad, a Diego Vila, quien gestionará la popular Concejalía de Fiestas.

Los cambios no afectan al pacto con Compromís, formación que mantiene sus responsabilidades en el consistorio, y dan pistas sobre la futura lista del PSPV para intentar revalidar la mayoría absoluta en el consistorio, postulando a los tres concejales citados anteriormente como posibles piezas clave en la candidatura. La otra concejala a la que afecta esta modificación orgánica es Anna Vicens, quien deja sus competencias en el plan Vila-real + neta e incrementará su acción en el departamento de Contratación.

ARGUMENTOS // El munícipe asegura que esta renovación se produce en tres áreas que le «preocupan» y reconoce que no está contento «por el desarrollo de las mismas» para avanzar en su «proyecto de ciudad». Asimismo, argumenta que «el 2018 ha sido el peor año de dificultades, al igual que lo fue el 2011, debido a las sentencias que han llegado por el tsunami urbanístico del PP y la nueva ley de contratos, que dificulta la labor diaria», subraya.

Asimismo, recalca: «Son movimientos que tenía pensados hace un año, pero que hacemos ahora tras la aprobación de los presupuestos del presente ejercicio y el reequilibrio de las cuentas, así como para apoyar departamentos que se han visto afectados por los problemas de los últimos meses y también por el incremento de actividad en la localidad».

DETALLES // Serralvo centrará su tarea las próximas semanas en las apariciones públicas como portavoz del equipo de gobierno --hoy será la primera con una rueda de prensa convocada a las 11.00 horas-- para ser el mensajero que transmita la gestión realizada en la última legislatura. Pero también, en palabras del primer edil, «para que las mentiras continuas que lanza la oposición no queden sin respuesta». «Por eso, vamos a mejorar la explicación de nuestras políticas y desmentiremos todas las falsedades», avisa. El munícipe indica que la asignación se debe a que está «muy cansado», por eso va a ocuparse «de trabajar a muerte para el futuro, porque la población aún no está salvada y hay que estar encima de proyectos atrasados, como la ronda suroeste, el Molí la Vila, o las actuaciones en los colegios Botànich Calduch y Sarthou». «También necesitamos a alguien que conteste las demagogias absurdas y para desarticular las reiteradas mentiras --en referencia a PP y Cs-- que vierten», dice. Y valora la importancia de Deportes y Salud para justificar la liberación a Serralvo de Fiestas. En cuanto a Valverde, asume la limpieza viaria y recogida de residuos, las cuales dependían hasta ahora de Proximidad (Vila) y Contratación (Vicens). Con las nuevas competencias, decretadas ayer mismo, la responsabilidad pasa a Servicios Públicos. «Vila-real no está tan limpia como nos gustaría. Tras hacer el diagnóstico, es hora de actuar y el departamento de Valverde es el que tiene las herramientas, como ya demuestra en otras áreas de mantenimiento urbano», explica Benlloch. Por su parte, Vila asume el encargo de organizar las próximas celebraciones de Sant Pasqual y debuta hoy en Junta de Festes.