La Unión de Consumidores de la Comunitat Valenciana «hará lo que haga falta» contra la empresa austríaca Platzer por llevar imágenes de mujeres semidesnudas en sus vehículos. Así lo afirma el secretario general del ente, Vicente Inglada, quien dice que «no es apropiado que ninguna compañía utilice cuerpos femeninos como reclamo publicitario» y recalca que están dispuestos a denunciar estos hechos como entidad.

El representante señala que «aunque no son un peligro para la seguridad vial, sí que representan un ataque para los derechos de las mujeres y contribuye a la degradación como sociedad».

Ayer mismo, el gobierno municipal de Vila-real acordó presentar una propuesta al resto de grupos con representación para manifestar el rechazo conjunto al uso sexista de la imagen de la mujer con fines publicitarios, que se aprobaría en un pleno extraordinario la próxima semana.

El alcalde, José Benlloch, lamenta que «en pleno siglo XXI, con todo lo que se ha avanzado contra el machismo, asistamos a este tipo de prácticas denigrantes». El primer edil agradece la labor del Grup de Dones vila-realense y recuerda a los grupos de la oposición que «contra el machismo no valen medias tintas».

El munícipe reconoce que le parece «incocebible» que tengan un expediente abierto desde hace meses y aún no se haya actuado.

En esta tónica, Inglada considera que «los procedimientos administrativos son demasiado lentos y tienen que penalizar a quien no cumple las reglas, se debería actuar rápidamente». El secretario de la Unión de Consumidores añade que «si no retiran las imágenes deberían prohibirles la circulación en este país».

Por otro lado, el secretario general de la Asociación Empresarial Castellonense de Transportes de Mercancías, Ignacio Riu, asegura que esta Platzer no pertenece a sus asociados y no quiere entrar a valorar esta polémica.

Desde la Federación Española de Transporte Discrecional de Mercancías, su vicepresidente, Carlos Fato, comenta a Mediterráneo: «Aunque estoy en contra de cualquier forma de degradar a la mujer, no creo que la intención de el propietario fuese denigrar a nadie. Aun así, tenemos que respetar los derechos de todos y si alguien se siente ofendido deberían retirar las fotos».

precedentes / Este no es el primer caso de imágenes sexistas en los vehículos. A principios del mes de julio un juzgado de Ciudad Real condenó a la empresa Benavent Transportes por las fotografías «de contenido claramente humillante y vejatorio» que lucía tras una querella presentada por la Asociación de Usuarios de la Comunicación.