Tel Aviv, próxima parada para el Submarino en la Europa League. El Villarreal CF afronta este jueves la cuarta jornada de la fase de grupos con la intención de certificar su clasificación en el estadio Bloombfield ante el Maccabi (18.55 horas, Movistar+), algo que nunca habían logrado a estas alturas de competición, ya que todavía restarán dos partidos una vez pase el duelo en suelo israelí.

Un conjunto de Unai Emery que llega lanzado, suma tres triunfos en el torneo europeo y puede asegurarse también esta jornada acabar como líder del grupo, en el caso de que no venza el Sivasspor en el otro partido del grupo que le enfrenta al Qarabag.

Tras su empate con sabor a victoria ante el Real Madrid después del parón internacional de selecciones, los amarillos llegan en un excelente momento, ya que suman diez partidos sin perder. Eso sí, no le va a la zaga el Maccabi, ya que los israelíes solo han perdido uno de sus últimos siete encuentros, justo el que le enfrentó al Submarino en La Cerámica.

CON LA ‘UNIDAD EUROPEA’ / En el conjunto de la Plana Baixa, dos son las ausencia destacadas para el compromiso de esta tarde. La ya consabida del goleador Paco Alcácer, una baja importantísima, ya que es uno de los máximos goleadores de la competición, y la de Moi Gómez, que además de ser uno de los futbolistas más utilizados por el técnico, arrastra unas molestias en los isquiotibiales --al igual que el ariete valenciano--, por lo que no viajó a Israel. Eso sí, como estaba previsto, ninguno de los dos iba a ser de la partida, ya que Unai Emery va a mantener su habitual política de rotaciones en esta competición, utilizando la llamada Unidad Europea.

Por eso mismo, lo normal es que hoy descansen jugadores como Sergio Asenjo, Raúl Albiol, Pau Torres, Mario Gaspar, Iborra, Gerard Moreno y uno de estos dos mediocentros: Parejo o Trigueros.

Es por ello que el técnico de Hondarribia plantee un 4-3-3 en suelo hebreo, con un once que no diferirá del formado por el argentino Rulli en portería; con una defensa que tendrá como laterales a Rubén Peña y a Estupiñán, en busca de que el ecuatoriano recupere su mejor estado físico, mientras que la pareja de centrales tendrá sabor argentino con Juan Foyth y Ramiro Funes Mori.

En la medular, volverá a la titularidad el francés Coquelin, para ser el ancla del equipo, contando en sus costados con el joven Álex Baena y bien Trigueros o Dani Parejo, aportando el talento para la canalización del juego.

Y arriba un tridente explosivo con la verticalidad de Take Kubo y Chukwueze en los extremos y el olfato goleador del killer colombiano Carlos Bacca, que atraviesa por un buen momento de forma.

Una alineación, la de la Unidad Europea, que ya incluso puede recitarse casi de memoria en Vila-real, al menos durante esta fase de grupo de la que el Submarino quiere sellar su clasificación.