Las horas de Take Kubo en el Villarreal CF parecen estar contadas. E futbolista japonés, que recaló en el Submarino en el mercado estival, no termina de entrar en los planes de Unai Emery y este sábado se ha quedado fuera de la convocatoria en el partido liguero que disputa el conjunto amarillo en el Estadio de la Cerámica ante el Levante. El motivo, que tanto el nipón como su club de origen, el Real Madrid, están negociando la salida del internacional por Japón, quien a su vez trata de recalar en el Getafe, también a modo de préstamo.

Por dicho motivo, y ante la apertura del mercado invernal este próximo lunes, 4 de enero, Kubo ha preferido no vestirse de corto ante el conjunto granota, ya que su intención es abandonar la entidad de la Plana Baixa.

EL PROBLEMA, EL MONTANTE ECONÓMICO

Pero una cosa son las intenciones del nipón y otra es la partida a tres bandas que deben dirimir en estos momento el Real Madrid, club al que pertenece su pase, el Villarreal, en el que está cedido hasta final de temporada y por el que el Submarino abonó 2,5 millones de euros, y el Getafe, equipo más interesado en captar a Kubo para lo que resta de ejercicio.

Mientras el Real Madrid quiere percibir todo lo pactado por dicha cesión, el Villarreal, evidentemente, solo quiere hacer frente a la mitad de lo pactado, al solo haber podido contar con el jugador media temporada. A su vez, el Getafe solo pretende pagar la mitad de la ficha (Kubo cobra alrededor de 2,5 millones en el Real Madrid), por lo que todas las partes tendrán que ceder para alcanzar un acuerdo.

Todo hace indicar que en las próximas horas los tres clubs y el propio jugador acercarán posturas para que así, finalmente, Kubo deje el Villarrea para racalar como cedido en el Getafe.