La reina Doña Sofía recibió ayer en audiencia al comité organizador del tradicional partido Drogas No. Fernando Roig, presidente del Villarreal C.F. y el hombre que ha logrado traer el acontecimiento a Vila-real, estuvo en el palacio de la Zarzuela, junto a su inseparable José Manuel Llaneza, y sus hijos Elena y Fernando, éste último también poseído por la fiebre del balón, como su padre.

Roig sigue empeñado en hacer crecer, crecer y crecer, como le gusta repetir siempre, al Villarreal. Y no para. Ha logrado asentar al Submarino en 1ª División y convertirlo en un ejemplo de lo que es una modélica empresa de fútbol, en una pequeña localidad de una pequeña provincia, en España y en el mundo. El Villarreal ya estuvo en la puerta de la final de la UEFA. Y no queda ahí. Roig siempre dice que no parará hasta ver a su club en la Champions. El próximo 4 de enero Vila-real será epicentro del fútbol y, además, por una buena causa. Ayer, Doña Sofía fue invitada al partido junto a la familia real. No descarten verlos en el Madrigal, y tampoco que el Villarreal juegue la Champions.