La Diputación Provincial de Castellón ha aprobado esta misma semana, y de manera definitiva, el Plan Provincial de Obras y Servicios (POYS) referente al año 2012, una iniciativa muy beneficiosa para los municipios castellonenses.

Dos cosas merecen destacarse. De un lado, el documento ha sido respaldado por la unanimidad de todos los grupos políticos con representación en el pleno, un hecho que evidencia la bondad de un programa es justo y beneficia a todos, a pesar de la politización que desde algunos partidos de la oposición se ha intentado hacer de este programa. El segundo dato a subrayar es que el POYS va a convertir a la Diputación en la institución que más invierta en infraestructuras de Castellón durante este año 2012, una muestra de la solidez de las cuentas de nuestra entidad, que el presidente Javier Moliner pone al servicio de los ciudadanos de esta provincia.

El Plan de Obras y Servicios de la Diputación, que tengo el honor de coordinar desde el área de Infraestructuras, asciende este año a 5,5 millones de euros de inversión total, y que permitirán acometer un total de 218 obras en 131 municipios y mancomunidades.

La aprobación de este plan es una de las apuesta de la Diputación Provincial de Castellón para crear empleo. Frente a la crisis económica que atravesamos, la institución es consciente de que tiene que poner todo lo que está en su mano para dinamizar la economía y fomentar la creación de empleo. Y en ello nos estamos empleando. Una muestra más de que las diputaciones son órganos imprescindibles para el funcionamiento de la provincia, en contra de la opinión de los socialistas, que por ellos ya estarían eliminadas, con todo lo que ello implica de pérdida de apoyo a los municipios más pequeños.

El equipo de gobierno de Javier Moliner mantiene intacta la filosofía que siempre ha presidido la política de la Diputación: no descuidar nada ni desatender a nadie, priorizando aquello que es irrenunciable.

Por eso cabe destacar también que, este año, la Diputación, además de subvencionar el 80% de los POYS, asume íntegramente la redacción de los proyectos de obra de los municipios de menos de 5.000 habitantes y asesora técnicamente a todo el que lo pida gracias a la labor de los técnicos provinciales, una medida a la que se han acogido ya, en este ejercicio, un total de 83 ayuntamientos, y que se va a traducir en un ahorro en las arcas públicas de las administraciones locales castellonenses de un millón de euros.

Reparación de calles, construcción de muros de cerramiento, rehabilitación de edificios, instalación de alumbrado público, limpieza de zonas verdes, ampliación de la red de alcantarillado, reparación de la red de agua potable o actuaciones para mejorar la acústica de espacios son algunas de las iniciativas que este año se van a contemplar en beneficio de los ciudadanos.

Un ejemplo de que el PP sí sabe gobernar, porque pese a la caída de los ingresos públicos, y de los recortes que el Gobierno central ha tenido que imponer, como consecuencia de la mala situación en la que Mariano Rajoy se ha encontrado las arcas públicas, el Plan de Obras y Servicios sigue vigente, con una cantidad importantísima de fondos y preparado para comenzar a generar empleo en Castellón. Una línea de trabajo más en las múltiples que la institución tiene abiertas en estos momentos para impulsar y dinamizar la actividad económica, la formación y las oportunidades en todos y cada uno de los rincones de Castellón. H