Una vez más, los socialistas han intentado que los castellonenses comulguemos con ruedas de molino. Esta vez con el tema de los Cercanías. Por desgracia, las mentiras se han convertido en una constante en la izquierda, pero no por ello dejan de sorprendernos e indignarnos. Miles de ciudadanos sufren cada día el caos para ir a sus puestos de trabajo; un servicio que funcionaba bien y que, poco a poco, ha ido deteriorándose hasta llegar a niveles casi tercermundistas. El caos en este servicio ha llevado a la cancelación de 7.593 servicios de trenes durante 2019 lo que supone 14 veces más que lo registrado durante el año 2015.
Desde el PP solicitamos que se solucione con urgencia el caos en la red de Cercanías de la Comunitat Valenciana, en sus ocho líneas, aunque con mayor incidencia en nuestra provincia. Por ello, se ha puesto en marcha la campaña #MenosCerca que recorre todos los puntos negros de las cercanías. Se trata de que se aprueben de una vez medidas efectivas y realistas, con un seguimiento permanente ante una situación que perjudica diariamente los castellonenses por los continuos retrasos, incidencias y cancelaciones que padecen. Este proceso de deterioro va a más por los recortes en la plantilla, errores en la gestión, falta de inversiones y la paralización del Plan de Cercanías presentado en diciembre de 2017 por el ministro De la Serna. Además, las cancelaciones no se informan con la suficiente antelación con lo que ello conlleva de pérdida de tiempo y retrasos para miles de personas que utilizan este servicio para ir a su trabajo. La impuntualidad ha llegado a ser de un 11% y esto está retrayendo a los pasajeros, cuyo número se ha visto reducido en pocos años en un 40 % pasando de 25,4 millones en 2006 a 15,5 en 2018. Lógicamente los usuarios buscan alternativas y optan mayoritariamente por el transporte individual, lo que suele ser peor desde el punto de visto de la sostenibilidad medioambiental.
Ahora, para salir al paso, el Ministerio de Transporte ha anunciado que Cercanías contratará 19 personas para cubrir jubilaciones y la reubicación de otras 17; billetes gratis por los retrasos de más de 15 minutos o cancelaciones; la mejora de la aplicación y una cuenta twitter por cada línea. Parches que nadie cree. Microdecisiones insuficientes. No es que no haya presupuesto, es que cuando gobierna la izquierda hay caos en la gestión por su mala planificación, el PSOE está desangrando el ferrocarril convencional: ni se invierte, ni se planifica ni se sustituyen las bajas.
EL MINISTRO Ábalos, en lugar de dar abrazos a golpistas como Delcy perseguida por la Justicia, debería atender a los usuarios de Cercanías, a los que tiene olvidados. Debería visitar más Cercanías y menos Barajas. Y mientras, Puig calla. Su conseller de Infraestructuras, Arcadi España, no se sabe dónde está ni qué hace, ni por qué no reclama lo que necesitamos. Este desprecio del gobierno socialista hacia la Comunitat Valenciana, con el silencio cómplice de Puig, es indignante.
Una vez más, todo lo que prometió el PSOE se ha desvanecido. Una vez más, nos han vuelto a engañar y una vez más la gestión les viene muy grande. Por desgracia, una vez más, la izquierda después de prometer, nos ha vuelto a decepcionar.
*Diputada del PP en Les Corts
