Esta semana el Ayuntamiento de Castelló ha vuelto a concentrarse para apoyar al pueblo ucraniano y seguir condenando la invasión de Rusia. La situación es cada vez más preocupante. La atrocidad de los bombardeos, de los ataques a corredores humanitarios, la tensión que crece en la zona y que está afectando a todos los países europeos constituyen un escenario desolador. Las consecuencias de esta situación, además, están abriendo profundas incógnitas en la economía mundial.
Y mientras, la ciudadanía protagoniza estos días enormes muestras de solidaridad. En Castelló esta semana ha quedado abierto el Centro de Recepción de ayuda humanitaria para el pueblo ucraniano, habilitado por el Ayuntamiento en el centro polifuncional de San Agustín y San Marcos, en coordinación con la Generalitat y la Federación Valenciana de Municipios y Provincias. Castelló se está volcando con el pueblo ucraniano, con las víctimas inocentes de esta cruel invasión de Rusia, trasladando al centro de recepción material sanitario, pediátrico, productos alimenticios, textiles térmicos, de higiene y de protección y supervivencia. Es la respuesta de la ciudadanía castellonense a una situación de urgencia europea. Asimismo, el Ayuntamiento ha dispuesto un canal de información para consultas sobre acogida y ayuda al pueblo ucraniano (ciutatrefugi@castello.es). Debemos volcarnos en estas acciones humanitarias, en el apoyo a las personas refugiadas que abandonan sus vidas y huyen de las guerras, de todas las guerras, de todos los horrores que les está tocando vivir.
Huida hacia la nada
En esta huida hacia la nada que está viviendo la población ucraniana, las mujeres son quienes protagonizan este éxodo, con sus hijos, sus madres y abuelas. Mujeres supervivientes que han abandonado todo, familias rotas que desconocen su destino inmediato. En las guerras, las mujeres y los menores son quienes más sufren este destierro involuntario y doloroso.
El pasado 8 de marzo, con motivo del Día Internacional de la Mujer, nos reunimos en torno al concepto de la igualdad, del feminismo y de la justicia social. En el Teatre del Raval, junto a la concejala de Feminismo, Verònica Ruiz, y con motivo de la entrega del Premio Olimpia a la gran fotoperiodista Carme Ripollés, hablamos de la fuerza de las mujeres, del concepto pacifista, igualitario e inclusivo del mundo que posee la mirada femenina.
A través de sus fotografías, nos ha ido mostrando la mirada de las mujeres, la discriminación, la tristeza, la supervivencia. En el contexto de este acto institucional sentimos muy cerca la lucha de las mujeres en todos los países y todas las sociedades, y de esas mujeres que están huyendo del dolor y de la muerte en Ucrania. Castelló es una ciudad para la igualdad. Las mujeres somos más de la mitad de la población mundial y merecemos los mismos derechos y las mismas oportunidades.
Esta semana que termina nos lleva a la cuenta atrás de las fiestas de la Magdalena, suspendidas dos años por la pandemia que hemos sufrido. Estas fiestas, a pesar de los momentos que estamos viviendo, significan la luz de la esperanza y las ilusiones contenidas. Castelló va a vivir un emotivo reencuentro, la ciudad será el gran abrazo colectivo que tanto necesitamos.
Alcaldesa de Castelló