Imperdonable

Seguramente, la famosa ley de garantía integral de la libertad sexual, conocida como ley del solo sí es sí, ha sido la mayor pifia legal de un Gobierno en España de toda la democracia. Es paradójico que una ley que pretendía defender a las víctimas beneficie a los delincuentes.

Muchos fueron los órganos y expertos que avisaron de lo que iba a suceder. Marta González, diputada del PP en el Congreso, fue tachada de facha y machista cuando meses antes de que la ley entrara en vigor advirtió de sus posibles consecuencias, y se ha demostrando que tenía razón.

Ya llevamos 91 delincuentes sexuales que han visto rebajada su pena y 14 más que ya han sido puestos en libertad. Les reducen las penas o salen en libertad sin saber si están rehabilitados, por tanto, sin tener la seguridad que no lo volverán a hacer.

Agresor libre

Las víctimas sufren ahora una doble condena, la de superar la agresión y la de vivir con miedo a que vuelva a suceder al ver a su agresor libre en menos tiempo. Pero los jueces, que últimamente son foco de críticas del gobierno, no son los culpables, no son fachas con toga, como dice el PSOE y sus socios, simplemente aplican la ley que ha salido de un gobierno tan populista como chapucero.

En Castellón ya se están estudiando 32 casos de rebajas de penas a agresores sexuales como consecuencia de la ley de PSOE y Podemos. Por eso, desde el PP presentamos una declaración institucional en el Ayuntamiento pidiendo al Gobierno de España que modifique la norma. La respuesta de PSOE, Compromís y Podemos ha sido oponerse y vetar la declaración.

Los socialistas y sus socios estarán contentos con la ley, pero nuestras hermanas, hijas o parejas están hoy más indefensas gracias a ellos.

Secretario general y portavoz adjunto PPCS

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