MARCIAL, el niño africano de seis años a quien los médicos extirparon un tumor benigno gigante en la cara el pasado 19 de enero en Barcelona, se recupera favorablemente y afronta un mes de rehabilitación, tiempo en que los médicos vigilarán la inflamación y que el tumor no se reproduzca. Desde hacía dos años, Marcial tenía un tumor vascular que, de seguir creciendo, hubiera afectado al interior de la boca, llegando a asfixiar al menor. Asimismo, el niño corría el peligro de sufrir una grave hemorragia por un simple golpe en la cara. Los médicos lograron extirpar el tumor a partir de una incisión parecida a la que se efectúa en los estiramientos faciales para evitar cicatrices visibles, y lo hicieron sin lesionar los nervios de la cara.