Cómo limpiar el horno: Cuatro trucos para hacerlo rápido y sin esfuerzo

Para evitar que se acumule la suciedad en el horno solo tienes que seguir unos sencillos pasos

Limpiar el horno puede ser una tarea fácil si sabes cómo hacerlo.

Limpiar el horno puede ser una tarea fácil si sabes cómo hacerlo.

F. Aznar

Uno de los electrodomésticos que suele dar más pereza a la hora de limpiar en el hogar es el horno… hasta ahora. Al margen de los productos específicos que podemos encontrar para este menester en el supermercado existen unos sencillos trucos que pueden facilitarnos muy mucho esta tarea. El vinagre de limpieza, el limón, la sal, la Coca-cola o el bicarbonato son importantes aliados para evitar que se acumulen los restos de comida en el horno.

Pese a que lo ideal es limpiar el horno después de cada uso, lo cierto es que es posible que no dispongamos del tiempo, siendo recomendable realizar una limpieza en profundidad aproximadamente cada medio año. No olvides también repasar las bandejas en las que sueles introducir la comida, pues también pueden acumular suciedad pese a que empleemos papel de horno para cocinar los distintos alimentos.

Cuatro trucos para limpiar el horno

  • Bicarbonato y vinagre, una combinación perfecta. Si el horno está muy sucio después de muchos usos no dudes a la hora de emplear estos dos productos muy recomendados para la limpieza del hogar. Para ello debes mezclar 10 cucharadas de bicarbonato, cuatro de agua y tres de vinagre hasta que se forme una pasta espesa. Cubre la suciedad con esta pasta y emplea la espátula para retirar los restos más incrustados. Déjala varias horas, por ejemplo, toda la noche. Al día siguiente aclara el horno con una bayeta humedecida con jabón neutro y retira finalmente con otro trapo los restos de jabón. Para que se seque, enciende el horno unos minutos.
  • El limón, desengrasante natural. Para limpiar el horno con limón en sencillos pasos debes en primer lugar exprimir el jugo de dos de estos cítricos. Introduce su jugo en una cacerola y enciende el horno 30 minutos a 250º. Posteriormente retira la cacerola y limpia las paredes del horno con un trapo. Si se han quedado restos incrustados ayúdate de una espátula. Quedará reluciente y sin restos de olor. Por si fuera poco el limón es antibacteriano, antiséptico y económico.
  • La sal, mucho más que un condimento. Para limpiar el horno con sal lo ideal es combinar medio litro de agua con 250 gramos de sal común o de mesa. Esparce la mezcla por las paredes y la puerta interior del horno y deja que actúe unos 20 minutos. Posteriormente enjuaga una bayeta húmeda y retira los restos que puedan quedar con una esponja.

  • Coca-Cola, ideal para la rejilla. Este refresco puede ser un aliado en la limpieza del hogar. En concreto hablamos del horno de la rejilla, pues si la dejamos un cuarto de hora en remojo con Coca-Cola, posteriormente la limpiamos con un trapo húmedo y quedará como nueva.
La rejilla del horno también debe ser limpiada periódicamente para evitar bacterias y suciedad.

La rejilla del horno también debe ser limpiada periódicamente para evitar bacterias y suciedad.