Una gran actuación policial. "Como en las películas, pero muy triste", decía Esperanza Bonet, una de las trabajadoras de la oficina.

José García explicó que fue frente a su estafeta donde el joven, "rubio, con la cara desencajada", cogió la sierra de la caja del carpintero que arreglaba la ventanilla número 6. "Ya hacía rato que el chaval rondaba al operario, y cuando este se ha girado para regañarle, le ha cogido la sierra y se la ha echado al cuello, amenazante, y entonces ha ido todo rápido: han salido casi todos, el chaval gritaba y la policía ha llegado", narraba José. "Le han ofrecido un vaso de agua y entonces le han reducido, ipso facto", explicó Bonet. Fuera, la expectación crecía. "Qué pasa, ¿una amenaza de bomba?", se rumoreaba. "No, un chaval que amenaza con matarse", explicaron.