El descuartizador de Vinaròs continuará en prisión. La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por Rasvan Adrian Maris contra la sentencia dictada el pasado 15 de marzo por la Audiencia Provincial de Castellón que le condena a 23 años de cárcel por asesinar con alevosía y ensañamiento y descuartizar a la que era su pareja, Nalea Sareva, en la capital del Baix Maestrat en el mes de febrero del 2019.
El alto tribunal valenciano considera así ajustado a derecho el juicio, celebrado con jurado popular, y tumba las tres razones esgrimidas por la defensa del condenado para reclamar la nulidad de todo el procedimiento judicial.
Sin indefensión
La Sala niega la principal petición consistente en la vulneración del derecho de defensa y, por ende, que el varón sufriera indefensión al no permitirse la suspensión de la vista para que pudiera estar asistido por un abogado de su confianza, pues renunció durante la celebración del juicio al que tenía.
En segundo lugar, el TSJCV también desmonta la nulidad porque Rasvan Adrian no pudiese hacer uso de su derecho a la última palabra, argumentando que efectivamente se concedió "en términos racionales".
La sentencia completa la desestimación sobre el último motivo del recurso de la defensa, que cargaba contra que no se sentase al lado de su abogado "para tener una comunicación constante e inmediata". Los magistrados justifican la distribución de los participantes en la sesión oficiada en el salón de actos de la Ciudad de la Justicia de Castelló en las medidas derivadas de la crisis sanitaria y otras como la equidad de partes.
Próximos pasos
Con todo, el condenado deberá seguir cumpliendo con la pena de prisión impuesta por el asesinato de Nalea. Si bien, en caso de querer proseguir con su intención de que se establezca la nulidad de esta condena deberá ahora interponer un nuevo recurso y elevar el caso hasta el Tribunal Supremo.
