Pérdidas en bares del Torreón por el incendio que causó cortes de luz

Pérdidas económicas por daños materiales y la caída de la facturación. Son los daños colaterales del incendio producido el martes por la tarde en un transformador de los apartamentos Montornés de la zona del Torreón de Benicàssim. 

El fuego ocasionó cortes de luz en numerosas viviendas próximas al bloque afectado, así como en restaurantes, chiringuitos y quioscos del paseo marítimo de la playa Torre Sant Vicent. Algunos de los negocios incluso se vieron obligados a cerrar mucho antes de lo habitual y a no poder prestar el servicio de cenas en esta jornada en plena temporada turística. 

"Hemos perdido género y tenemos averías en electrodomésticos"

En el caso del chiriguito Zalé, su propietario, Adrián Forés, explicó ayer que el suceso ocurrió justo en el servicio de comidas, alrededor de las 15.30 horas; y permanecieron sin luz hasta las 21.30. «Acabamos de dar las comidas, tuvimos que cambiar platos calientes a fríos y pudimos servir bebidas hasta que se quedaron calientes». «Muchos aparatos se rompieron del fuerte estallido, como el equipo de música, dos congeladores y neveras, que se fundieron y dejaron de funcionar, tras la subida de tensión. Nos lo tendrá que pagar el seguro. También hemos perdido algo de género, como la horchata, carne y salmón», lamentó. Aunque todavía agradece que los hechos se produjeran en martes en lugar de fin de semana. Aún así afectó reduciendo gran parte de la facturación de la jornada.

Cuadro eléctrico roto

Giuliani’s Beach Restaurant fue otros de los negocios de hostelería perjudicados. Su gerente, Álvaro Amores, indicó que «nos afectó bastante». «Se nos rompió nuestro cuadro eléctrico. Terminamos las comidas como pudimos y cerramos, no pudimos dar las cenas y no llegamos a abrir por la noche, ya que la luz no volvió hasta las 22.00 horas aproximadamente. Y el sistema wifi tampoco nos funciona. Estamos calculando las pérdidas económicas y reclamaremos al seguro lo que nos corresponda», señaló Amores. 

Otro establecimiento de la zona tampoco pudo prestar el servicio de cenas y se vio obligado a cerrar en torno a las 18.00 horas. «En nuestro caso se nos ha estropeado la pantalla del ordenador, algún ventilador y aparato eléctrico». «Nos pilló en pleno servicio de comidas y tuvimos que anular todas las reservas de la noche, por suerte eran clientes de confianza y lo entendieron. Por suerte, tenemos un generador y conectamos los congeladores», manifestó.

Los cortes de luz también perjudicaron al vecindario de la zona, que no pudo encender los aires acondicionados y ventiladores durante toda la tarde pese a las altas temperaturas y el sofocante calor de estos días. Algunos también perdieron los alimentos que tenían almacenados en los congeladores y estuvieron a punto de marcharse a sus domicilios de Castellón. Por otro lado, la incidencia también llegó hasta la playa, en zonas como Torre Sant Vicent y Els Terrers, donde dejaron de funcionar los lavapiés, ya que funcionan con agua de mar y las bombas con electricidad.