Un caso de ‘bullying’ con golpes y ciberacoso en Castellón llega a la Fiscalía

La Fiscalía Provincial ha recibido ya las diligencias intruidas por la Guardia Civil en un presunto caso de bullying a una menor de edad, que habría sufrido ciberacoso, además de insultos, vejaciones, amenazas y golpes. Los hechos habrían sucedido, al parecer, en el curso 2022-23 y se habrían prolongado hasta este mismo verano, culminando con una supuesta agresión física en una playa, a manos de varias adolescentes.

Según ha podido saber este diario, la menor acudió a un cuartel de la Guardia Civil a denunciar los hechos, en compañía de su familia. Al parecer, aunque inicialmente la víctima no tenía problemas con sus compañeros, el acoso fue iniciándose poco a poco. Otra menor le pidió a la denunciante ropa, que esta le prestó, sin llegar después a devolvérsela.

El inicio

La afectada comenzó a recibir insultos de forma habitual y, según su testimonio, sus agresores también se inventaban cosas sobre ella para intentar que los profesores la expulsaran. El acoso a la menor fue in crescendo, pasando también por sufrir el lanzamiento de material escolar. Estos hechos fueron, según sostiene la Guardia Civil, puestos en conocimiento del personal docente, quienes «no ofrecieron solución alguna ni auxiliaron a la alumna».

Este ambiente de vejaciones y hostigamiento también se trasladó, como es frecuente en la actualidad, al plano digital. La víctima habría comenzado a sufrir ciberacoso, a través del móvil y de las redes sociales, con llamadas amenazantes a través de Instagram.

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Ante estos hechos, la menor dejó de acudir al instituto casi por completo. Una vez finalizado el curso escolar, se produjo un incidente en una playa de Castellón, según ha denunciado la familia.

Altercado en la playa

Al parecer, la denunciante estaba bañándose cuando un grupo grande de personas, una treintena, llegaron al lugar. Todo parece indicar que no llevaban ropa de playa y se dirigieron a la víctima con insultos. La menor devolvió esos insultos y entonces, presuntamente, comenzaron a agredirla con arañazos, tirones de pelo y golpes hasta que la tiraron al suelo, donde supuestamente, siguieron pegándole. 

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Más tarde, la denunciante conseguiría zafarse y meterse en el mar para protegerse de las agresiones. Posteriormente, se habrían hecho una serie de publicaciones a través de las redes sociales, en las que se hizo referencia a la agresión sufrida por la menor.

El teléfono 900-018-018 atiende las 24 horas del día, los 365 días del año y es una herramienta indispensable en la lucha contra el acoso escolar.