Condenado a 5 años de cárcel por raptar a su exnovia menor y víctima de violencia de género en Vila-real

Condenados por delitos de detención ilegal, lesiones --con agravante de parentesco en uno de los casos-- y quebrantamiento de medida cautelar, además de un delito leve de hurto. Dos hombres han sido sentenciados este lunes en la sección Segunda de la Audiencia Provincial de Castellón por el secuestro de una menor de edad de 17 años, exnovia de uno de ellos y víctima de violencia de género. Los hechos enjuiciados sucedieron en Vila-real en el año 2022.

Los procesados, que se encontraban en prisión preventiva y han estado custodiados ayer en el banquillo por policías nacionales y guardias civiles, han alcanzado un acuerdo con la Fiscalía y la acusación particular antes del inicio del juicio oral. El exnovio de la chica, un conocido delincuente con numerosos antecedentes, ha sido sentenciado a cinco años de cárcel y a 80 días de trabajos en beneficio de la comunidad. Su cómplice, otro hombre que lo ayudó a retener a la joven y a un amigo de esta, fue condenado a ocho años (cuatro por cada delito de detención ilegal).

Los hechos admitidos

Según mantenía la Fiscalía en su escrito de acusación provisional, la víctima tenía entonces 17 años. El Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vila-real ya había emitido una orden de alejamiento y prohibición de comunicación para su exnovio. Sin embargo, como ellos mismos admitieron ayer cuando aceptaron la condena pactada, ninguno de los dos la respetó, pues la menor fue con un amigo a una vivienda en la que estaban los dos acusados. Cuando los primeros quisieron marcharse de allí, los procesados cerraron la puerta de salida y quitaron la llave del cerrojo. Aunque el amigo de la chica consiguió saltar horas después, saltando desde la parte de arriba de la vivienda hasta la calle, la adolescente permaneció retenida. 

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Encerraron a la chica en una habitación y le pusieron un candado. Su exnovio y el cómplice la cogieron del pelo y le dieron patadas y puñetazos en la barriga, la cara, las piernas y los brazos. Quien fuera su exnovio y maltratador, le cogió el móvil y lo rompió.

Acto seguido, los hombres volvieron a abandonar la habitación, dejando a la chica encerrada. Finalmente, la adolescente pudo salir del cuarto cuando acudieron los agentes actuantes y mediante el auxilio de los mismos.

Como publicó recientemente este diario, el infierno de la violencia de género alcanza ya a 41 niñas de Castellón, que están incluidas en el sistema de vigilancia del Ministerio del Interior. La educación en igualdad no erradica una lacra que tiene a ocho menores en riesgo alto y con protección policial en la Comunitat Valenciana, la cifra más alta de España.

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