La oficina abierta por el Ayuntamiento de Vila-real para informar a los autónomos y pequeñas empresas de la ciudad sobre los procedimientos para beneficiarse de las distintas ayudas incluidas en el plan Resistir de la Generalitat ha contactado en los cinco días que han transcurrido desde su apertura, el pasado lunes, con un total de 177 establecimientos hosteleros de la ciudad.

El objetivo es informarles sobre las subvenciones a las que pueden acceder, así como para remitirles una encuesta, encaminada a pulsar y tener una mayor concreción acerca de las dificultades que atraviesan a causa de las restricciones establecidas por la Generalitat en la lucha contra la epidemia del covid-19.

El concejal de Economía, Xus Madrigal, explicó, en el transcurso del pleno extraordinario celebrado ayer, la importante labor que realiza el personal asignado a esta oficina, procedente de los programas Avalem Joves y Ecovid.

Han atendido en apenas cinco jornadas un total de 100 llamadas telefónicas, además de haber remitido unos 230 correos electrónicos y contactado con 24 gestorías que tramitan ayudas.

Unanimidad plenaria

El pleno del Ayuntamiento de Vila-real aprobó ayer por unanimidad el expediente de modificación de créditos por valor de 222.490 euros con los que garantizan la aportación municipal a la línea Paréntesis del plan Resistir de ayudas para los autónomos y microempresas de los sectores económicos más afectados por la pandemia (192.490 euros), así como para subvencionar con 30.000 euros a la familia de Zoe Prieto Branchadell, para colaborar con los gastos ocasionados por la intervención quirúrgica a la que ha sido sometida recientemente en el Boston Children’s Hospital, para corregirle la cardiopatía completa con la que nació hace ahora 16 meses.

El alcalde, José Benlloch, agradeció a los grupos políticos su voto a favor de esta dotación de fondos para el plan Resistir, que se financia en base a la partida reservada a fiestas del presupuesto prorrogado del 2020.

Además, Benlloch explicó que la ley obliga a abrir un periodo de alegaciones de 15 días, durante el cual aprovecharán para redactar las bases que regirán la concurrencia a las ayudas de la línea Paréntesis, que es la que gestionan directamente los ayuntamientos. En este caso, el consistorio vila-realense será el encargado de distribuir un total de 1.283.267 euros entre los negocios de los sectores más castigados por la pandemia.