Más de 400 son las solicitudes recibidas en el Ayuntamiento de Vila-real para conseguir la bonificación del 95% del IBI a los locales con negocios que el consistorio aplica por segundo año para paliar los efectos de la crisis en la economía local. Fuentes municipales recuerdan que esta medida de estímulo fiscal, acordada en el seno de la Mesa del pacto local por el renacimiento de la que forman parte todos los grupos municipales, tiene como objetivo ayudar a la reactivación de sectores económicos especialmente perjudicados por la pandemia

Cerrado el plazo de presentación, se han contabilizado 402 peticiones por parte de titulares de negocios o propietarios de locales, que optan a la declaración de actividad de interés especial o utilidad pública, incorporando un compromiso del arrendatario de que la bonificación repercutirá en el negocio, en el caso de establecimientos en alquiler.

Ampliación de sectores

En esta ocasión, el Ayuntamiento había decidido ampliar al sector de escuelas infantiles, academias y repasos, sumándose así a las actividades previstas de inicio como hostelería, ocio, comercio minorista, transporte, los servicios de cuidado personal y las actividades deportivas. El alcalde de Vila-real, José Benlloch, recuerda que esta iniciativa de alivio fiscal «es la más potente que hemos adoptado en apoyo a las empresas, una medida pionera y singular que nos diferencia de otros municipios».

"Es la medida de alivio más potente que hemos adoptado en apoyo a las empresas, una medida pionera y singular que nos diferencia de otros municipios"

José Benlloch - Alcalde de Vila-real

El primer edil reitera que esta acción, que cuenta con el consenso de todos los grupos políticos, «define la línea de apoyo a la reactivación social y económica que hemos desplegado desde el inicio de la crisis, siempre dentro de nuestras posibilidades económicas, para aliviar la situación de quienes peor lo están pasando por el impacto del covid, al que se han sumado las crisis de costes energéticos y precios acentuadas por la guerra de Ucrania». 

La bonificación del 95% del IBI forma parte del Plan de ayuda y estímulos fiscales para apoyar a los comercios y la economía local frente al impacto del covid-19 que, dos años después, “sigue lastrando los negocios”, lamentan desde el consistorio. Impacto al que se suma la escalada de precios en la economía, con un IPC desbocado, graves consecuencias económicas de la guerra de Ucrania y el encarecimiento de la energía. Frente a esta realidad, Benlloch presentó recientemente el Plan de estímulo, que contempla la congelación de impuestos como el IAE, vehículos o ICIO y el mantenimiento de algunas medidas de ayuda aplicadas ya en anteriores ejercicios. 

Balance y previsión

En 2021, se beneficiaron de esta medida 306 negocios de Vila-real, que se ahorraron el pago de 370.488 euros. Cerca de un 80 % de las ayudas se concentraron en los sectores de restauración, comercio, ocio y hostelería. Este año, las previsiones podrían ser incluso mayores, al entorno de 500.000 euros de impacto para las arcas municipales, aunque el coste real de la medida se conocerá en el momento en que se contabilice el número de solicitudes que cumplen los requisitos para beneficiarse de la medida.