El Ayuntamiento de Vila-real ha readjudicado a Andrés Domínguez la gestión del restaurante del Termet, después de que los técnicos descartaran a un segundo postor en el correspondiente proceso de licitación. De esta forma, el consistorio garantiza al menos para una década más un servicio de hostelería en la zona del paraje natural más concurrido de la ciudad. De esta forma, Domínguez consigue mantenerse al frente de este recinto hostelero, propiedad del municipio, por otros 10 años más, que se sumarán a los 20 que ya acumula como gestor del restaurante El Termet.
Además, el concurso público incluye la explotación del bar-cafetería de la piscina de verano, ubicada en el mismo enclave natural. Desde el consistorio expresan su “satisfacción” por el aval logrado a ambas prestaciones públicas que, de alguna manera, suplen la falta de una mayor oferta de restauración en la zona, después del cierre del restaurante El Molí en el año 2019. Un recinto que, en todo caso, está a la espera de la realización de un estudio técnico y económico para reconvertirlo en un hotel rural con encanto, tal y como se aprobó en pleno el pasado mes de junio.
En el caso de El Termet, Domínguez pujó por continuar los 20 años que lleva de gestión del mismo por otros 10 más, abonando un canon anual de 30.177 euros, lo que supone un 65% más de la tasa mínima establecida en el pliego de condiciones de la licitación, que era de 18.268 euros, con impuestos incluidos.
El uso
El edificio del restaurante ubicado a la entrada del paraje natural es de propiedad municipal y cuenta con una superficie construida de casi 280 m2, además de una terraza de 445 m2. Se trata de un establecimiento en el que es habitual el lleno a la hora del almuerzo o la comida durante todo el año y prácticamente a todas horas en los meses de verano, básicamente porque es el único espacio de ocio existente en la zona.
Desde el consistorio destacan que la concesión de ambos espacios --el restaurante El Termet y el bar-cafetería de la piscina de verano-- en un solo paquete son complementarios, por cuanto, aunque en edificios diferentes, «están en un mismo paraje». Y añaden que ello «permitirá que exista una mejor coordinación en el servicio y que se puedan aprovechar las sinergias de ambos negocios, compartiendo y coordinando los medios personales y materiales necesarios y redundando en una mejor atención a los usuarios».
Una vida dedicada a la hostelería local
Andrés Domínguez lleva 20 años ligado al sector de la hostelería en el paraje del Termet de Vila-real. En el 2002 su familia asumió la gestión de los dos establecimientos ubicados en el espacio natural: El Termet y El Molí. Desde el primer momento, Domínguez y su esposa, Yoana Layunta, se encargaron de llevar el primero de ellos, junto a su suegro, José.
Aunque los inicios fueron complicados, Domínguez ha logrado dar forma, en los 20 años de gestión del restaurante El Termet, a una clientela tan variopinta como fiel. Y es que hasta allí acuden a almorzar, comer o cenas --en este último caso solo los tres meses de verano-- «desde agricultores que traen sus bocadillos de casa hasta gerentes de grandes empresas y también trabajadores de distintos sectores».
«Vamos luchando porque la situación es difícil», señala el hostelero, quien hace hincapié en que el secreto de su éxito es «la constancia y el trabajo».
