CaixaBank ha alcanzado un acuerdo con los trabajadores de Banco de Valencia para homologar de forma progresiva sus condicionales laborales y salariales a las de su propia plantilla, una vez lleve a cabo la integración de la entidad valenciana, prevista para mediados de julio. CaixaBank, Banco de Valencia y los representantes sindicales de ambas entidades aprobaron ayer este acuerdo laboral, que establece una progresiva homologación de la retribución (durante un plazo de 60 meses) y del resto de condiciones laborales.

Así, CaixaBank incorporará como personal propio, desde la fecha efectiva de la integración, a los empleados de Banco de Valencia. El pasado mes de marzo CaixaBank llegó a un acuerdo con los sindicatos para reducir la plantilla, sin recurrir a los despidos, en 2.600 personas. Este acuerdo preveía además la movilidad de otros 800 empleados. H