La patronal castellonense CEC ultima un presupuesto de alrededor de 100.000 euros para este año, que debería ser el del inicio de los pasos hacia su salvación si quiere tener un futuro que no sea la absorción por la confederación autonómica, hacia lo que ya se postula la CEV, como ayer martes publicó este rotativo.

En este sentido, según ha podido saber este diario, las cuentas, ajustadas al límite, incluyen el salario de «solo una trabajadora», después de que haya abandonado la patronal el otro asalariado con que quedó tras el expediente de regulación de empleo, confirma el portavoz de la comisión gestora, Néstor Pascual.

De esta manera, actualmente los esfuerzos de la comisión se centran en que la administradora concursal designada para tratar de hallar una viabilidad a la patronal provincial apruebe el presupuesto y fijar una fecha para la asamblea general que debe ratificar todas las cuentas, para la que todavía no hay una previsión de convocatoria.

Además de los 100.000 euros de presupuesto, las cuotas de las entidades sectoriales y de las empresas asociadas -que son la única vía de ingresos de la CEC- permitirían reservar aproximadamente unos 50.000 euros este año para comenzar a pagar la deuda de la patronal, que se eleva a prácticamente dos millones de euros.

Un panorama complicado así el que tiene la CEC y que debe tratar de clarificar el concurso.