El Ministerio de Fomento concretó ayer que destinará un total de 349,7 millones de euros de los presupuestos a los tres tramos pendientes de la autovía del interior (A-7), entre Vilanova d’Alcolea y Traiguera, 48 kilómetros fundamentales para rematar la conexión con Tarragona.
En los próximos días se publicará en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el trámite de someter a información pública los documentos técnicos, con sus estudios de impacto ambiental. En el plazo marcado se podrá alegar la concepción del trazado, la declaración de interés general o lo relativo al impacto medioambiental de esta alternativa a la AP-7 y la N-340. La documentación podrá consultarse, entre otros lugares, en los ayuntamientos de los municipos afectados, tal y como avanzó en su día Mediterráneo.
El delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Moragues, resaltó que Fomento da «un paso más para que Castellón tenga una vía rápida y gratuita y la A-7 se convierta en el corredor mediterráneo por carretera». En su opinión, «va a suponer no solo la conexión con Tarragona, sino que permitirá que este nuevo eje se convierta en el gran corredor mediterráneo de pasajeros y mercancías por carretera». Asimismo, el portavoz gubernamental subrayó el compromiso inversor del Gobierno con las infraestructuras de la provincia. Y recordó que «ya están adjudicadas las obras de acondicionamiento del Puerto de Querol por cerca de 40 millones y ahora avanzamos en la prolongación de la CV-10».
En otro orden de cosas, el secretario provincial de Infraestructuras del PSPV, Sergio Bou, pidió al delegado del Gobierno «que deje de engañar a los ciudadanos de Castellón, que ya están hartos de que Rajoy les venda humo».
