El precio de la luz anda estos días en la mente de todo el mundo y eso que la fortísima subida de los precios de las últimas semanas afecta a menos del 40% de los usuarios de Castellón. Unos 156.000 hogares de la provincia, los que están acogidos al denominado mercado regulado, se han visto afectados por un hachazo que en la práctica supone entre 8 ó 9 euros extra al mes. El resto, los clientes del llamado mercado libre (unos 255.000) no verán reflejada en su factura estos vaivenes. Al menos, por el momento.

Oscilaciones aparte, la realidad es que la luz se ha convertido en los últimos años en una especie de artículo de lujo. Y lo es para todo el mundo, tenga la tarifa que tenga. Gestos tan sencillos como poner en marcha la lavadora, encender la televisión o enchufar la plancha cuestan cada vez más dinero. ¿Cuánto? Un 60% más en diez años, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que analiza cómo ha evolucionado el gasto medio por hogar y qué partidas destina cada familia de la provincia a sufragar el coste de la electricidad, el gas o las gasolinas.

En el 2006, cada hogar de Castellón invirtió una media de 495,31 euros en pagar la factura de la luz. O lo que es lo mismo: unos 41 euros al mes. Diez años después, la cifra ha aumentado a 790,15, casi 66 euros mensuales. Dicho de otra manera: en una década, el gasto por hogar ha aumentado 59,5%. Lo llamativo es que ese fortísimo incremento ha coincidido en una época en la que los salarios de los trabajadores han ido claramente a la baja.

EL CONSUMO BAJA // Podría pensarse que ese alza del gasto de las familias obedece a un aumento del consumo. Pagamos más porque gastamos más luz. Esa sería la lectura fácil, pero la realidad es bien distinta. Las estadísticas del Instituto Valenciano de Energía (Ivace) desmienten esa tesis y demuestran que al consumo le ha ocurrido lo contrario que a los precios, es decir, ha ido cuesta abajo. En 2006 los hogares de la provincia consumieron 967 gigavatios por hora (GWh). En 2014 fueron 833, un 16% menos. ¿La conclusión? El dinero que las familias destinan a pagar la factura de la luz ha aumentado porque el coste medio también lo ha hecho, y no poco, un 46%.

Cada hogar de Castellón gastó en el último años 790 euros en pagar la factura de la luz pero a esa cantidad hay que añadir el coste de otras energías como el gas o los combustibles. A esta partida se van casi 980 euros del presupuesto familiar, y al igual que ha sucedido con el coste de la electricidad, la partida no ha hecho más que aumentar. Hoy roza los 1.000 euros. En el 2006 eran tan solo 666. Esta cantidad representa el 4% del gasto total medio de las familias de Castellón, cifrado en 24.955 euros al año.

Aunque en la última década la luz ha subido para todo el mundo, el último hachazo afecta solamente a quienes tienen tarifa regulada o precio voluntario (PVPC), ya que la factura depende de la variación del mercado eléctrico mayorista, más conocido como pool. Para estos usuarios el 35% del recibo depende del precio de la luz que se marca cada día en este mercado y que varía cada mes, mientras que el 65% restante depende de los denominados peajes y de los impuestos que fija el Gobierno español. Y entre esos impuestos está el IVA. El resto de los hogares se rigen por lo que se denomina como mercado libre, en el que las compañías eléctricas venden paquetes personalizados con precios mensuales fijos, que en principio no se ven alterados por los vaivenes del mercado mayorista.

SE PUEDE AHORRAR // La luz está mucho más cara ahora que hace un mes, pero los expertos aseguran que es posible pagar un poco menos. Y la clave está en ahorrar. Dejar la factura a cero es imposible, pero sí se pueden arañar unos cuantos euros al mes. Dos ejemplos. El standby o modo en espera de muchos electrodomésticos o dispositivos, como por ejemplo el televisor, es un auténtico devorador de kilowatios (kw) y puede suponer entre el 6% y el 10% del consumo eléctrico de la casa. Un consejo es apagar los dispositivos. La potencia contratada también es importante. Si es posible reducirla, el ahorro puede ser de unos cuatro euros al mes.