El centro de Castellón verá reducido notablemente el ruido en las calles y avenidas a partir de las próximas fiestas de la Magdalena gracias a la peatonalización del 74% del área afectada (entre las aceras y la plataforma que compartirán viandantes, ciclistas y el transporte público) por las obras de construcción del TRAM.

Lo explicó ayer Vicente Dómine, director general de Obra Pública, quien añadió que con la reurbanización integral que se está llevando a cabo “y que reducirá en un 55% la superficie destinada a calzada de transporte privado, se respirará aire más puro y se paliará extraordinariamente el ruido de los 9.000 coches diarios que circulaban por estos viales”. Al respecto apuntó que “en pocas ciudades de España el centro será tan tranquilo como aquí. De hecho, hay ayuntamientos de la Comunitat y de fuera que ya se han interesado por el proyecto”.

Dómine explicó que en estos momentos se están culminando los trabajos en la calle Zaragoza “y están ya muy avanzados en Gasset y Ruiz Zorrilla, mientras que en la plaza Cardona Vives ha finalizado la remodelación del firme y resta instalar los elementos de jardinería”. La evolución de las obras “permite tener la esperanza de que, como nos ha pedido el consistorio, la zona centro esté lista para la campaña de Navidad y el resto en marzo”.

El representante del Consell explicó que todas las nuevas aceras tendrán de 1,5 a 2 metros para cumplir con la legislación en materia de accesibilidad universal, y destacó que “ya pasea mucha más gente y a todas horas por el Ribalta”. Preguntado por una posible sentencia en firme contra el paso del TRAM por el parque dijo: “Estudiaríamos una solución, pero mientras tanto, seguimos”. H