La Unidad Adscrita a Castellón de la policía de la Generalitat ha logrado en el último año incrementar su actividad casi un 11% y acercarse a los 10.000 servicios solo gracias al “esfuerzo” de los agentes y “doblando turnos y haciendo más horas de trabajo”, ya que la plantilla --tiene 48 efectivos-- se ha visto reducida en los últimos cinco años en 20 personas, explica el jefe del Grupo Operativo de esta unidad, Vicente Oliver.

Oliver, nulense veterano del cuerpo que ha recibido hace escasas semanas la medalla de oro al mérito policial por su trayectoria profesional en el Cuerpo Nacional de Policía, al que pertenecen los efectivos autonómicos, califica de “buena noticia” el anuncio de que dentro de este año se pondrá en funcionamiento la Comisaría de Vall d’Alba, que supondrá la incorporación de 28 nuevos agentes, así como asegura que, “esperamos que, efectivamente, la nueva comisaría se ponga pronto en marcha”.

una labor ‘sorda’ // El jefe del Grupo Operativo de la Unidad Adscrita de Castellón destaca, además del trabajo realizado en atención al ciudadano --ha crecido un 27,4% en el 2011-- y las tareas relacionadas con Bous al Carrer, en las que el equipo es especialista, destaca las actuaciones realizadas por el grupo de menores, menos conocidas.

Oliver explica que es una “labor sorda”, dentro de la que se han llevado a cabo en el último año “más de 300 traslados, en ocasiones juzgados de Castellón, pero también a otras provincias”, además de actuaciones de un cariz distinto como “la vigilancia en discotecas y, en algunos casos, se ha localizado algún menor que se ha entregado a sus padres”.

En este sentido, el responsable del cuerpo señaló en el momento de la entrevista esta semana que, por ejemplo, “hay servicios como los de esta noche pasada, cuando nos han llamado de Peñíscola, donde habían localizado a dos menores fugados del centro del Baix Maestrat, uno de ellos conflictivo, y nuestros agentes se han desplazado allí, para acompañarlos después al Hospital de Vinaròs”. “Después -relata- una patrulla se ha desplazado a Vinaròs recoger a un menor para llevarlo a Elche, y este tipo de actuaciones son constantes”, concluye.

La policía autonómica también se ocupa de realizar investigaciones relacionadas con menores o control del absentismo escolar, así como de los traslados de mujeres que han sufrido maltrato cuando lo solicita la Fiscalía o el Centro Mujer 24 horas.

En el ámbito del medio ambiente, Vicente Oliver destaca entre los trabajos llevados a cabo durante el último año, “un asunto por el que localizamos 2.500 toneladas de residuos peligrosos, cuya retirada y gestión correcta llevó varios meses de trabajo”.

Al mismo tiempo, menciona la creciente demanda de apoyo de los agentes de la Unidad Adscrita en Castellón por parte de los pequeños municipios del interior, de los que muchos carecen de policía local y, como consecuencia “solicitan cada vez más nuestra colaboración para servicios de atención al ciudadano, especialmente cuando llegan las fechas de celebración de las fiestas”. H