Valencia, 28 may (EFE).- La Sindicatura de Greuges ha aplaudido el protocolo para atajar el maltrato a personas mayores en cuya redacción trabaja el Consell, después de que hace unos meses abriera una queja de oficio tras conocer algunas "situaciones lamentables" en las que ancianos habían sido agredidos por sus cuidadores.
La actuación del Sindic se produjo en diciembre del pasado año tras conocer algunas situaciones en las que personas mayores y/o con algún grado de dependencia habían sido agredidas físicamente por sus cuidadores o se habían producido abusos de confianza o engaños que había provocado el expolio económico de las personas cuidadas, aprovechándose de su debilidad física y/o mental y soledad.
Ante el incremento de mayores que recurren a la ayuda de cuidadores ajenos a su entorno familiar, el defensor del pueblo valenciano apostó por el desarrollo de protocolos o procedimientos de supervisión y de control de estos recursos asistenciales, según un comunicado de esta entidad.
Según la Sindicatura, la "supervisión directa de estas relaciones ha de asumirse como un nuevo reto por parte de las administraciones en un momento en que la esperanza de vida aumenta sensiblemente y cada vez más es mayor el número de personas ancianas que recurren a esta ayuda asistencial en su propio domicilio".
Por ello, instó a la Administración a "garantizar que la persona necesitada de cuidados no quede a expensas de la voluntad de su cuidador/a si no hay un entorno familiar o social próximo que supervise esa relación".
Según el sindic, la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas les ha comunicado que son "conscientes de la carencia de un protocolo de actuación que permita intervenir ante las situaciones de maltrato a personas mayores y que están trabajando en la redacción del mismo".
La finalidad del documento será describir las actuaciones a realizar por los profesionales de los servicios sociales municipales cuando tengan conocimiento o sospechen que una persona mayor pueda encontrarse en una posible situación de maltrato.
Este protocolo pretende dotar de los instrumentos necesarios, comunes y homogéneos, para la detección, valoración e intervención para todos los profesionales implicados en la atención social, de forma coordinada con las actuaciones del sistema sanitario, social, policial y judicial.
"Desde el Síndic, valoramos positivamente esta decisión y esperamos que la aprobación e implantación del mismo sea una realidad en un futuro inmediato para así dar respuesta a las situaciones descritas", asegura el comunicado. EFE
