Enagás ya ha encargado al Massachusetts Institute of Technology (MIT) -considerdo la mejor universidad del mundo- el estudio clave que, con bastante probabilidad, determinará el futuro de la plataforma del Castor, situada frente a la costa de Vinaròs. El análisis era un paso obligado, pues así lo determina el real decreto ley aprobado en octubre del 2014 por el Consejo de Ministros. Este acuerda que la empresa, participada por el Estado y encargada de la gestión técnica del sistema gasístico a nivel nacional, debe “realizar los informes técnicos necesarios para determinar la correcta operatividad de la infraestructura y, en su caso, los trabajos para su desmantelamiento”. Un informe que ya tiene encima de la mesa el Ministerio de Industria desde hace unos tres meses y del que el Ejecutivo guarda silencio.

Pero, además, el documento recuerda que el Gobierno encargó sendos informes al Instituto Geográfico Nacional y al Instituto Geológico y Minero de España “que no permiten aún emitir una conclusión definitiva sobre las eventuales consecuencias de una vuelta a la operación”. Y recomiendan “la realización de una serie de trabajos adicionales que, sin perjuicio de las posibles aportaciones de técnicos internacionales, permitirían disponer de una base sólida y coherente sobre la que tomar una decisión sobre el futuro de la planta”. Y es que su actividad se paralizó, por orden ministerial, tras registrarse más de 500 seísmos en la zona entre septiembre y octubre del 2013.

Pues bien, el Ministerio que encabeza José Manuel Soria estableció hace más de un año un primer contacto con el MIT, si bien hasta ahora el prestigioso centro estadounidense no había recibido el encargo de un informe específico referente al proyecto Castor y la situación geológica de la zona en la que se encuentra ubicado.

Su conclusión puede ser determinante para que el Ejecutivo decida qué hacer con el almacén: ponerlo en marcha de nuevo en el futuro o desmantelarlo, como reivindican los municipios del Maestrat. Mientras, Enagás, que ha contratado al grupo británico Lloyd’s para la certificación externa del proceso de cierre, continúa con las tareas para proceder a su hibernación y la previsión apunta a que estarán en verano. H