El festival Vila-real en Dansa puso punto y final el domingo a su séptima edición tras tres intensos días dedicados exclusivamente a la danza contemporánea, que han propiciado que el Festival de Dansa Breu siga consolidándose como uno de los referentes de todo el territorio valenciano.
El nivel artístico de la última jornada del festival dejó el listón alto. Por la mañana, Dansa en Família, con Yolanda Peña, consiguió que grandes y pequeños se animaran a subir al escenario para disfrutar del espectáculo Mis brazos, mis codos, mis pies y mi boca, y participar en un taller lleno de ternura en el Auditori Municipal Músic Rafael Beltrán Moner.
La plaza de la Vila fue de nuevo el espacio escogido para la Dansa al Carrer. Y Park de ZUK. Performing Arts fue el dúo encargado de dar el pistoletazo de salida a la programación de la tarde. Desde Madrid trajeron otra pieza cargada de sentimiento los que durante la semana habían sido protagonistas de Dansa als IES.
En el Auditori Municipal, la brasileña Natalia Fernandes interpretó el solo This is not mine; y la segunda pieza breve de danza contemporánea corrió a cargo de Adrián Castelló. Para cerrar, Fil d’Arena brindó su Salt con media hora de performance que arrancó los aplausos del público.
El concejal de Cultura, Eduardo Pérez, y la directora artística del festival, Pepa Cases, materializaron la clausura de Vila-real en Dansa con elogios al festival.
