El incendio declarado en la noche del jueves en el parque natural de la Serra d’Espadà continúa aún activo, pese a que en la mañana de ayer los bomberos del Consorcio Provincial y las brigadas de la Generalitat lo dieron por controlado. En total, según indicaron fuentes fidedignas a Mediterráneo, la superficie calcinada suma 15 hectáreas, todas ellas de monte con pino viejo.

Durante esta madrugada tres brigadas han permanecido refrescando la ladera del monte El Carrascal, pasto de las llamas, y que, pese a que las rachas de viento no alcanzaron los 25 kilómetros por hora, se extendió muy rápido, dada la frondosidad y la escasez de lluvias de importancia en la provincia desde noviembre.

El diputado provincial de Bomberos de Castellón, Luis Rubio, en declaraciones a este periódico, instó a los ciudadanos, sobretodo a los agricultores, a “extremar las precauciones cuando se disponen a realizar quemas controladas”. Y matizó: “Deben hacer franjas de defensa para que no extienda el fuego y no quemar nada cerca de zonas en las que pueda existir evidente peligro de propagación...”.

ANTE EL JUEZ // El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil identificó ayer al agricultor causante del incendio, que fue quien avisó a los servicios de emergencias en el momento en que se le fue de las manos la quema. Este hombre, que no es residente en Azuébar, deberá de declarar ante el juez como presunto autor de un delito de incendio por imprudencia.

OTRO EN CULLA // El trabajo del Consorcio Provincial de Bomberos de Castellón tuvo que sofocar también a mediodía otro incendio en Culla, en la partida Pla de Les Vinyes, donde ardieron 500 metros cuadrado de pinar. De nuevo, la causa de este fuego fue una quema de matojos de un agricultor. H